Imborrable historia escribió Isaac Delgado en su magistral presentación en el Festival de Jazz de Mompox. Un artista supremo, con temas de insigne valía conceptual y musical, sustentado en una orquesta portentosa.
El artista cubano, el de mayor renombre internacional, debió esperar al último turno para deleitar a los asistentes al Festival de Jazz de Mompox, cuando ya el reloj pasaba de las 3.30 de la madrugada.
Interpretó un repertorio fastuoso, con los temas que se le reconocen en Colombia, así como tesoros de su antología musical. Sobre las 4.30 de la mañana terminó, dejando en el ambiente los ecos de su “loco, qué pasa loco, contrólate muchacho, que esa niña no es pa´ti”… “ella es un reloj que viene dando la hora”…
Junto a su voz sugestiva y su estilo imanador, estuvo una orquesta de kilates y kilates: dos trombonistas fenomenales, un saxofonista recursivo, dos trompetistas de campeonato… piano, teclado y bajo formidables, y una cuerda de percusión impresionante, sobre todo el súper timbalero, de tan altísimo nivel que parece que toda la orquesta girara en torno suyo.