Colombia cayó 3-2 en 10 entradas ante Estados Unidos en su debut en el Clásico Mundial y nadie ignoró su extraordinario desempeño, pero en la selección cafetalera quedó la sensación de que pudo hacerse más el viernes en el Marlins Park.
La mayor potencia del planeta en el juego de pelota, con una alineación All-Star de Grandes Ligas, jugando en casa, perdía 2-0 en la sexta entrada y necesitó extra innings para doblegar a un rival poco rutinario que nunca rehuyó el pleito y se plantó en el centro del ring.
Pero, las cosas se inclinaron al final a favor de Estados Unidos, en alguna medida, porque Colombia dejó escapar a uno de los gigantes de la justa mundialista.
“Es un placer vestir esta camiseta. No tengo palabras para describir el sentimiento, pero estoy molesto con el resultado”, lamentó José Quintana, quien abrió por la novena sudamericana y se enfrascó en un duelo de pitcheo con Chris Archer, abridor de Estados Unidos.
“Tuvimos muchas oportunidades de quedarnos con la victoria. Pero no vinimos aquí a relajarnos. Tenemos el sueño de avanzar a la segunda ronda y espero que le haya quedado claro a todo el mundo el material del Colombia. No conseguimos la victoria, pero hicimos las cosas correctamente”, indicó el serpentinero de los Chicago White Sox.
Quintana perdió el sin hit después de dos outs en la sexta entrada y fue sacado del partido con 63 lanzamientos, dos por debajo del límite de la primera ronda del campeonato.