El concejal Antonio Quinto Guerra Varela se pronunció sobre el tipo de crecimiento que requiere Cartagena de Indias para el siglo XXI, y destacó tres opciones: construir y compartir una visión de ciudad; construir un plan de desarrollo a largo plazo, y un gran liderazgo para convertir a Cartagena de Indias en una ciudad inteligente, conectada, sostenible y autosuficiente en el siglo XXI.
Su visión fue consignada en una columna de opinión en El Universal de la edición de este martes 13 de enero, cuyo texto es el siguiente:
Cartagena del siglo XXI
Por: ANTONIO QUINTO GUERRA VARELA
En un reciente artículo del Banco Mundial sobre las ciudades latinoamericanas, se afirma que “el modelo de urbanización de las ciudades de la región ha sido ineficiente, inequitativo y poco competitivo, lo que ha llevado a que la población urbana pague altos costos económicos, sociales y ambientales”.
En Colombia, Cartagena de Indias es una ciudad emergente que está llegando al millón de habitantes y tiene el más alto crecimiento poblacional e industrial del último cuarto de siglo. Sin embargo, el crecimiento urbano, desarrollo humano, sostenibilidad y competitividad del territorio no han se han movido a la misma velocidad.
Esta paradoja obliga a preguntarnos: ¿Cuál es el tipo de crecimiento que queremos implementar para tener la Cartagena del siglo XXI? Las respuestas a este interrogante pueden venir desde distintos rincones e ideologías, pero en cualquier caso, necesitan de por lo menos tres condiciones fundamentales.
En primer lugar, construir y compartir una visión de ciudad. Solo si logramos un acuerdo sobre hacia dónde queremos ir, es posible encontrar un futuro de progreso y bienestar. Para ello, FUNCICAR lideró la iniciativa Visión Cartagena. Del trabajo de muchos cartageneros y cartageneras de todos los sectores y condiciones, existe hoy un sueño colectivo que debe ser asumido por la sociedad. Dado el paso de la construcción colectiva, procede ahora una masiva socialización.
Un segundo aspecto estratégico es construir un plan de desarrollo de largo plazo que muestre el camino para alcanzar esa visión de ciudad. Es hora de unir a expertos nacionales e internacionales alrededor de un ejercicio profundo de prospectiva que diseñe las obras, programas y proyectos de desarrollo local. Otras ciudades colombianas lo están haciendo con resultados positivos. La evolución de las grandes urbes, los desafíos de la posmodernidad y las realidades de la nueva economía, nos obligan a planificar de manera ordenada y estratégica la Cartagena de Indias del tercer milenio.
Y en tercer lugar, necesitamos de un gran liderazgo que provenga de los representantes comunales, empresariales, académicos y políticos, para convertir a Cartagena de Indias en una ciudad inteligente, conectada, sostenible y autosuficiente en el siglo XXI. En varias ocasiones de nuestro pasado, hemos logrado sobreponernos a las dificultades. Ahora debemos hacerlo nuevamente. En ello, Gobierno, Concejo Distrital, congresistas de Bolívar y sector privado, debemos comprometernos a apoyar e impulsar la gestión gubernamental, condición necesaria para desarrollar nuestra sociedad.