La Salsa es la que manda (Homenaje a Cheo Romero)

En la edición 74 de Revista Zetta (2002), John Zamora publicó este reportaje con el gran Cheo Romero, cuya imagen ilustró la portada. Es trabajo cobra relevancia ahora que se programa un homenaje a este gran cultor de la música nuestra. Este es el texto:

Pese al “boom” de la Champeta y la vigencia del Vallenato, la Salsa goza de un sitial de honor en los cartageneros. Los programas especializados en radio, y los “salseros” de los barrios son prueba de su supremacía. José Guillermo Romero Verbel es considerado el hombre que más sabe de esta música. Cheo es Salsa y este es su perfil.

Por JOHN ZAMORA – Zetta Semanario del Caribe

El Gran Combo y Oscar de León atiborraron el patio de banderas del Centro de Convenciones. Salsa y Playa o El Templo de la Salsa son los programas radiales de más audiencia cada domingo. Los “salseros” en los barrios son un éxito. Los nuevos sitios y los tradicionales están de moda para bailar o escuchar de Salsa.

La ciudad tiene un gusto musical heterogéneo, ya que pese al “boom” de la Champeta o la vigencia del Vallenato, cohabita con otras expresiones musicales, siendo la más preponderante la Salsa.

José Guillermo Romero Verbel, conocido como Cheo Romero, considerado el más amplio conocedor de la Salsa, opina que buena parte de esta situación se debe a la radio FM, que la ha impulsado con programas especializados, respondiendo así a una aspiración del público.

Por eso, si a la Salsa le va bien, igual sucede con Cheo. Está en un momento irrepetible de su carrera profesional. “Lo más grande que me ha sucedido en mi vida en la Salsa me pasó el 29 de junio pasado, con Óscar de León”.

Con su voz carrasposa, narra emocionado que sin estar involucrado en el espectáculo, sin haber buscado al prestigioso artista, de repente fue llamado a la tarima, y entre sus característicos soneos improvisados, De León alabó los conocimientos de Cheo en la Salsa. La emoción aumentó por tratarse del día en que Héctor Lavoe cumplía 9 años de fallecido. Es que Cheo está acostumbrado a las “cobas” o saludos de los artistas, muchos de los cuales son sus amigos, pero nunca había recibido un homenaje tan especial como este.

Tiempos de la Armada

El joven que cayó a las aguas de la bahía de Cartagena, estando al servicio de la Armada, en nada se parece el alegre hombre que hoy es abanderado insignia de la Salsa. El ARC 7 de Agosto, donde él estaba destacado, estaba acoplado junto al ARC 20 de Julio. Cheo realizaba faenas de pintura y del otro barco se disparó un chorro de vapor que lo tiró al agua. Rescatado, permaneció una semana en el viejo Hospital Naval.

En los cuatro años en que fue marinero pudo conocer varios países del Caribe, compenetrarse más con la Salsa. Ello lo llevó a pelearse con la disciplina naval. Era evasor, llegaba tarde, y todo por andar en “salseros”. Inevitablemente pidió la baja. Además, era pésimo marinero: se mareaba y vomitaba.

Getsemanisense

Antes de ser un marinero, era un miembro de los “Happy Boys”, un grupo de amigos de su natal Getsemaní, del que todos terminaron siendo profesionales universitarios, menos él. Recuerda que conoció a la Salsa en la sede del Sindicato de Choferes. Luego con sus amigos hacían apuestas sobre conocimiento musical. De la caja de cerveza, 10 eran para el que ganaba, 10 para el que perdió y 10 para Cheo, que era el jurado.

Al mencionar a Getsemaní, y su calle del Pedregal, no pudo dejar de recitar la letra completa del tema del inmortal Lucho Pérez. “Ay que orgulloso me siento de ser Getsemanisense”.

El deportivo

Cheo llegó a la radio por la vía de los deportes. Se unió a los programas “Buenos Días Deportes” de Eugenio Baena y “Visión del Deporte” de Luis Alberto payares Villa. Obviamente, el béisbol y el boxeo eran su fuerte.

Cree que su nombre comenzó a hacerse más popular cuando Baena viajó a cubrir la pelea de Pambelé con Aaron Prior en agosto del 80, y Payares, a la vez, fue a transmitir un nacional de béisbol en San Andrés. “Estuvo como 15 días al frente de los programas”.

La música

Cheo llegó a la radio musical en 1985, con Alfredo Atencio y Mincho Paternina, en programas de corte novembrino.

Sin embargo, dado que su música era la Salsa y que había muchos programas de vallenatos, decidió abrirse campo en lo suyo, siendo ya muy popular en las tarimas y entre los músicos salseros.

En 1991 fue llamado por César Fernández, entonces gerente de Olímpica Stereo, para hacer el programa dominical “Salsa y Playa” en compañía de Tony Rosales, bajo la dirección de Larry “Pupilo” Ortiz.

Ya posicionado como el Hombre de la Salsa, fue llamado por Humberto González, gerente en 1997 de Caracol Cartagena, para hacer “El concierto de la Salsa”, en formato similar.

El año pasado regresó a Olímpica, y hace Salsa y Playa los domingos y los feriados.

Los amigos

Cheo ha cosechado amistades de primeras figuras de la salsa. Sus más allegados son los integrantes de El Gran Combo, Óscar de León, Richie Ray y Bobby Cruz. También se encuentran los colombianos Hugo Alandete, Joe Arroyo y Juan Carlos Coronel, o los internacionales Johny Pacheco, Monguito, Cheo Feliciano, Ismael Miranda, Ismael Quintana, Willie Colón, Henry Fiol, Héctor Casanova, Santiago Cerón, y la grandísima Celia Cruz.

Cheo tiene una galería completa de fotos de todos los artistas con que ha compartido.

Cheo

En el Teatro Cartagena fue la presentación de la película “Nuestra Cosa Latina” de la Fania All Star, y dentro de sus estrellas estaba Cheo Feliciano.

Dado que todos lo conocías como José Guillermo, fue el presentador Mañe Vargas quien le comenzó a llamar “Cheo” en alusión al gran cantante, y desde entonces casi nadie lo conoce por su nombre de pila.

La Salsa

No es coleccionista de música, pues toda la tiene “en el disco duro”. La gente dice que no sabe bailar, pero Cheo se mueve con lo principal: “Yo siento la música, cada instrumento, cada letra”.

Nunca ha pensado cantar, y la verdad es que su voz n o le ayuda. Eso sí, piensa escribir un libro, y de eso “ya hemos venido hablando con John Zamora”.

“La Chaucha” es un tema original de Antonio María Romeo, pero la versión que ejecuta la Charanga Rubalcaba es la canción que más le gusta de la Salsa. En lugar especial pone al “Negro Ray”, de Ray Barreto, porque su estribillo musical era silbado por sus amigos Happy Boys en Getsemaní.

Quedan muchas cosas en el tintero, pero como Cheo es tan versátil, seguramente habrá otra oportunidad para seguir hablando de Salsa, la que manda.