Cartagena de Indias, 10 de mayo de 2022.- Siguiendo su jocoso libreto, el neomalandrín alcalde de Cartagena, William Dau, anunció que seguirá insistiendo ante el Concejo en su pretensión de lograr autorización para un crédito público, embeleco en el que el Consejo Gremial de Bolívar lo viene secundando, aun sin ejecutar los miles de millones en recursos propios, evidencia de la mediocridad de su gobierno.
Insistió en acusar a los concejales de no acceder a la petición debido a que no les da beneficios individuales, exceptuando a la concejal Claudia Arbolea, la única que se ha declarado como «bancada de gobierno».
Cual adivino, anticipó que ningún concejal será reelegido, con la misma certeza con la que pidió cupos en Pacto Histórico para la Cámara de Representantes y ninguna de sus recomendadas superó la taruya del canal del Dique.
Dau continuará «echándole» la gente en contra al Concejo como mecanismo de presión.
La previsible diatriba de Dau se registró momentos después de que el Concejo aprobara una ponencia negativa contra este embeleco, sustentada en su quebranto al principio de planeación, y a la inconveniencia de endeudar a la ciudad por diez años, con altos intereses que solo benefician al sistema bancario, además sería un premio a la mediocridad en le ejecución presupuestal, dominada por la contratación de OPS y no en inversión social.