Espejito… espejito… ¿quien será? ¿quién será?

Todo indica que este vienes se abrirán los sobre de los cerca de 25 inscritos en la convocatoria abierta para seleccionar al próximo presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio. No obstante, todo es extraoficial porque la entidad ha guardado preocupante silencio sobre nombres y mecanismo de escogencia.

Lo único público hasta el momento es el perfil exigido, que se fijó en la página web de la entidad: educación acreditada en pregrado y posgrados, con especialización, maestría o doctorado. También una experiencia mínima de 8 años, de los cuales al menos 4 en cargos de dirección de empresas de reconocida trayectoria nacional o local. Y la página también señala que se prefiere que dicha persona maneje el idioma inglés.

Será la junta Directiva la encargada de hacer la escogencia, asesorada por una firma especializada, pero no se saben claramente los mecanismos o criterios. Lo cierto es que en momentos de coyuntura económica compleja a nivel mundial y retos de competitividad, es crucial la elección de la persona que tendrá la dirección del gremio más importante de la ciudad. La ciudad, que requiere posicionarse como núcleo empresarial y multiplicador de crecimiento, no puede equivocarse y la Cámara de Comercio está llamada a se el faro económico de un modelo de ciudad competitivo e incluyente y que potencialice la innovación y el desarrollo de nuestro sector empresarial.