El Concejo de Cartagena se prepara para arreciar el debate a la administración de Manolo Duque y de allí el llamado del presidente de la corporación, Javier Curi Osorio, a “cargar municiones y preparar artillería para llevar a cabo un control político excepcional”.
En su enérgico discurso de instalación de sesiones extras, Curi Osorio dijo que el control político en ese tono se hará “no solo a las entidades descentralizadas sino a todas las concesiones de servicios que han sido otorgadas en el Distrito de Cartagena en los últimos 25 años”.
El férreo control político abarca a Aguas de Cartagena, cuyo gerente, John Montoya Cañas, cayó en desgracia por cuenta de negar una información solicitada por Curi Osorio a través de un derecho de petición. “Desde ya le anticipo que usted será amablemente invitado al seno de esta corporación en las próximas sesiones ordinarias”.
Al preguntar ¿qué esconde el gerente de Acuacar?, el presidente del Concejo le dijo que “usted no puede andar como una republiquita independiente”, y le aclaró que la empresa es de los cartageneros. “No es suya, no es de los españoles”, advirtió.
Curi Osorio dijo que además de Acuacar, también estarán bajo examen Transcaribe y Edurbe, así como la ESE Cartagena de Indias, Colegio Mayor de Bolívar, Distriseguridad, EPA, Corvivienda e IPCC.
