«Grietas en murallas de Getsemaní están controladas»: Escuela Taller

La Escuela Taller Cartagena de Indias (ETCAR), delegada por el Ministerio de Cultura para la administración de las Fortificaciones, informa que las grietas existentes en el lienzo de muralla de la Avenida del Pedregal, en el barrio Getsemaní de Cartagena, están inactivas.

El director de obras de la ETCAR, el arquitecto restaurador Mario Zapateiro Altamiranda, explica que en la zona hay siete grietas identificadas y registradas desde hace más de 10 años a través de estudios realizados por el ingeniero experto en estructura, Jorge Rocha.

Así mismo, informa que la ETCAR, al asumir la administración de las Fortificaciones, identificó las diferentes afectaciones en este tramo de muralla, el cual ha sido interviniendo en los últimos tres años a fin de controlar dichas hendiduras.

Origen

Zapateiro explica que “las gritas en Getsemaní se originaron por una descompensación que sufrió el lienzo de muralla al quitar parte de la estructura original que conformaba lo que se conoce como ‘El cuerpo perfecto de la muralla’».

Aclara que “era un muro que estaba diseñado para retener un material entre dos porciones de muralla, al momento de retirar el relleno la muralla sufre un pequeño pandeo hacia adentro y se generan las grietas que se presentan a lo largo del recorrido”.

El arquitecto asegura que las grietas son monitoreadas por la ETCAR mensualmente. “Hoy podemos decir que estas grietas o fracturas, están absolutamente inactivas, esto está corroborado por el asesor estructural de la ETCAR, el ingeniero Rocha, quien también le hace seguimiento a estas grietas”.

Trabajos

Entre las obras de mantenimiento y conservación realizados en la muralla ubicada en Getsemaní se encuentran el retiro de árboles y raíces que amenazaban la estructura muraria, la consolidación de las juntas de cada mampuesto; así como los trabajos de jardinería y limpieza que se realizan constantemente.

La ETCAR tiene proyectado para el primer semestre del 2016 la ‘costura’ de las grietas utilizando un procedimiento diseñado especialmente para ello que seguirá la conformación imbricada de las piedras.

Los trabajos se realizarán con los aprendices de la ETCAR que están en proceso de formación bajo las indicaciones de los maestros y la vigilancia de la Dirección de Obras.

Zapateiro asegura que “es una actividad absolutamente segura y controlada. Cartagena puede estar tranquila que mientras estemos haciendo este tipo de seguimiento las murallas van a estar bien protegidas”.