La construcción de un sótano debilitó la estructura de la “Casa de la Magdalena”, que se vino al piso, arrastrando consigo cables de alta tensión que tumbaron dos postes, uno de los cuales cayó sobre un vehículo estacionado, dejando sin servicio eléctrico al sector.
La emergencia no dejó heridos, pero si un gran susto en los ocho albañiles que trabajaban en la obra, y que pernoctaban allí mismo, en la calle de la Magdalena.
Desee anoche comenzaron a sentir desprendimientos de piedras, y esta mañana comenzaron a trabajar con cierta reserva a las 7 de la mañana. Después de 45 minutos, se asustaron a ver que caían más fragmentos y se escuchaban …… “Esto se va a caer” dijo uno de ellos y abandonaron el sitio, lo que les salvó la vida. En seguida llamaron a los bomberos, que llegaron a las 8 de la mañana. Al estimar la gravedad del asunto, acordonaron la zona y comenzaron a evacuar las edificaciones vecinas.
Quince minutos después se vino la casa abajo. La gruesa y pesada pared, de gran antigüedad, arrastró tres líneas de alta tensión, y determinó la caída del poste de esa calle. Enseguida, como dominó, cayó otro poste ubicado en la acera opuesta, sobre el parque Centenario, destruyendo un vehículo Chevrolet Spark de placas KKC568.
Por fortuna, los bomberos habían cerrado el paso a vehículos y transeúntes, de lo contrario podría estarse hablando de heridos.
A partir de ese momento quedó suspendido el fluido eléctrico en la zona, pero de inmediato llegaron operarios de Electricaribe a diagnosticar los daños y proceder a las reparaciones para restablecer el servicio.
—Información en desarrollo—