Educación y calidad educativa – Opinión de Nacira Ayos

Por Nacira Ayos Figueroa (Especial para Revista Zetta).- Es de valorar es esfuerzo que se ha hecho a nivel nacional en el sentido de diseñar políticas, programas y proyectos que buscan una educación incluyente e integral con programas como la Jornada Única, Ser Pilo Paga, Programas de Alimentación Escolar y todos los programas y proyectos en materia de cobertura, eficiencia, calidad y pertinencia en todos los momentos de formación.

Infortunadamente pese a ese esfuerzo, el resultado de los estudiantes en las distintas pruebas a nivel nacional es pobre, sin mencionar que el país no ha podido estar al nivel de la calidad educativa en resultados de pruebas internacionales como las pruebas PISA y estudio TIMSS donde se muestra un nivel medio de estudiantes colombianos, frente a estudiantes de américa latina y bajo frente a estudiantes de países del primer mundo (tomado de: https://www.mineducacion.gov.co/1621/article-107522.html).

Por otro lado, es muy fácil cuestionar la gestión de los responsables de la administración de la educación básica y media, así como la calidad de los licenciados responsables de dicha educación; y medir dicha gestión por los resultados que obtienen los estudiantes en las distintas pruebas a nivel nacional, pero alguien se ha detenido a evaluar la calidad de educación que reciben esos responsables de la educación básica y media?

El llamado entonces es a revisar dónde está el error, qué se debe hacer para mejorar, qué políticas se deben establecer para el fortalecimiento de la calidad educativa; lo que me lleva a echar una mirada a un país que a diferencia de Colombia, está catalogado como el país de mejor educación del mundo, hago referencia a Finlandia, sistemáticamente situado en los primeros puestos del ranking por excelencia, según el informe PISA que elabora la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico).

Resulta que en Finlandia, no todo el que quiere puede acceder a estudiar licenciatura en educación; pues esta es una de las profesiones más apetecidas por los finlandeses y no solamente por la gran remuneración económica que recibe el profesor, sino también porque el ejercicio profesoral goza de excelente reputación; pues para ser docente se debe tener al menos tres años de formación en licenciatura y dos años de maestría, así como también debe tener excelencia académica. Sólo quienes la tienen pueden acceder a ser maestros.

Así las cosas, en Colombia se debe comenzar por revisar cuáles son los requisitos para acceder a los distintos programas de licenciatura ofertados por las Instituciones de Educación Superior –IES- , así como a evaluar la calidad de la oferta de dichos programas, y por qué no, entrar a revisar la dinámica a través de la cual se obtiene la acreditación de las mismas.

Se debe exigir a las IES del país, la región y la ciudad que dejen de prepararse para recibir a los pares académicos que acreditaran el programa (s) o a la institución y más bien se preparen para formar profesionales íntegros y de calidad que sean capaces de transformar la realidad del contexto en el que impacten.

Sólo de esta manera se puede comenzar a pensar que los niños, niñas y jóvenes de las distintas instituciones de educación básica y media, recibirán educación de calidad, que los prepare para el contexto globalizado y puedan obtener resultados favorables en las pruebas diseñadas para medir su educación y más aún, los prepare para la vida.

Nacira Ayos Figueroa

Administradora de Empresas

Especialista en Gerencia Social

Magister en Administración e Innovación

Doctoranda en Ciencias de la Educación

nayfi75@gmail.com