Unas tarifas más flexibles y competitivas aunadas a unos precios razonables en boca de pozo son dos de las alternativas para relanzar la demanda de gas natural en Colombia.
Frente a los indicadores de demanda que señalan un sostenido crecimiento hasta 2014 y luego una desaceleración hasta 2016, se plantean fórmulas que despejen el panorama y hagan que la demanda vuelva a crecer.
Rodolfo Anaya Abello, vicepresidente de Distribución de Promigas, planteó varias aristas que apuntan en esa dirección, teniendo en cuenta las condiciones actuales del sector.
Por una parte, se tiene una autosuficiencia estimada hasta 2025, buenos prospectos de nuevos hallazgos y la oportunidad de importar gas desde Venezuela, lo que significa que el abastecimiento está garantizado. El siguiente paso está en el área de los precios, que deben ser competitivos y adecuados, para generar esa ecuación donde el resultado es el crecimiento de la demanda.
“Vemos que el sistema de formación de precios no está funcionado y se requiere un mecanismo más efectivo”, señaló Anaya Abello.
Durante el Congreso de Naturgas realizado en Cartagena de Indias, el vicepresidente de Distribución de Promigas Rodolfo Anaya, anotó otros aspectos que deben mejorar: integración de mercados, tarifas con flexibilización, desarrollo de infraestructura o volver al sistema de estampilla en el transporte.
“La prestación del servicio también presenta molestias para el usuario, como la revisión quinquenal con una firma autorizada, lo que es engorroso y dificultoso para comunidades de la provincia colombiana”, expresó.
Anaya no ocultó que los precios altos han generado una disminución del consumo promedio, y una pérdida de competitividad a nivel industrial. “Los industriales han desacelerado el consumo de gas, y en el caso de la industria de gas natural vehicular GNV, la caída de la demanda es evidente”, manifestó.
“Si el gobierno flexibiliza las normas, podemos convertir el Transporte Masivo de las principales ciudades y el parque automotor de carga en todo el país a gas natural, reduciendo las emisiones de CO2 y mejorando sustancialmente la calidad del aire que respiran los colombianos”, indicó Anaya.
Con respecto al proyecto de una nueva terminal de importación de Gas Natural Licuado GNL en Buenaventura, Anaya concluyó que si bien es posible que ésta se requiera, no está claro cuándo y quién deba costearla.