El insólito caso de una comunidad que rechaza obras de protección, mientras otras zonas reclaman atención, sucedió en Gambote. Unos trabajos para evitar que las crecidas del canal del Dique y la ciénaga aledaña afecten a una comunidad, por valor de $10 mil millones, fueron rechazadas por los mismos pobladores.
Ante la sorpresa, no salían del asombro el gobernador Dumek Turbay y el director del Fondo Adaptación, Iván Mustafá, quienes vieron como el 80% de la comunidad decidió rechazar la millonaria y necesaria inversión.
La razón es que las obras, por razones técnicas, deben pasar por unos asentamientos irregulares, y los poseedores reclaman altas sumas de dinero para retirarse de la invasión.
La reunión donde se comunicó la sorpresiva decisión fue precedida de todo un trabajo de acercamiento y socialización de las obras, con acompañamiento de organismos de control, pero más pudo la sinrazón que el sentido común.
Los trabajos están prospectados para ejecutarse en una zona contigua al nuevo puente, a pocos metros del cauce fluvial.
En consecuencia, los $10 millones serán reasignados para invertir en una comunidad que valore y aprecie los esfuerzos del Estado para adelantar obras de protección frente a las inundaciones.