Por Álvaro Royo (Especial para Revista Zetta).- (Xiamen -China).- No quería sonar aguafiestas hace unos días porque una resaca con sentimiento de culpa es una combinación fatal, pero varios días después del festejo si podemos tirarle un poco de tecla al tema.
El solo hecho de celebrar nos llevaría a hacernos la pregunta: ¿celebrar qué en las fiestas de la Independencia? ¿Acaso estamos mejor que antes del 11-11 de 1811? ¿Si? ¿No? Ummmmm… A mí me parece que la ciudad cambió de verdugos, se les dijo adiós a los saqueadores españoles para cambiarlos por los saqueadores locales que tenemos ahora.
¿Y tiene algo acaso que celebrar eso?
Me decía mi primo Jairo que tiene que sufrirse el día a día en Cartagena, que él se había quedado en casa los días de fiesta de noviembre porque ya no se puede ni salir a la calle, o te ensucian, o te maltratan, o te atracan o te matan… y todo gratis, en rebaja a lo black friday. ¡Escoge!
Las opciones son variadas, no las buscas pero te las encuentras. También me contaba que él podía percibir manifestaciones de resentimiento de los que cometían esos actos, que era como si esas personas esos días tuvieran licencia para cometer abusos, por eso me lo repetía una y otra vez que la única opción era quedarse en casa.
Y lo veía yo en los videos que se ven en las redes sociales, fiesta y tal, pero a la vez homicidios, riñas, heridos, accidentes que no deberían presentarse cuando se está celebrando algo.
¿Pero qué carajos es lo que estamos celebrando esos días?
Joda, Alvaro, me decía: ¿no te acuerdas que celebramos la independencia de Cartagena de España que sucedió en 1811, siiii? ¿Y que más? Bueno que allí se sucedieron eventos que desencadenaron en la independencia de Colombia. Ahhh si, ya recuerdo, pero también recuerdo que los hechos cuentan que la independencia se dio por querer tomar el control los cartageneros de su ciudad ya que se sentían desplazados y maltratados por los españoles ¿Y? ¿se logró ese objetivo? Independizarse si, pero el maltrato y saqueo siguen, en manos de otra minoría, pues eso, cambio de manos, nada diferente
Porque con los niveles de inseguridad, pobreza, desempleo, desnutrición que hay en Cartagena, realmente no hay nada que celebrar más que un hecho histórico, pero a la vez bastante simbólico, no representa nada esa independencia de unos, y entregarse a otros, que por muy locales que sean no deja de ser un desastre el cómo se encuentra y cómo han llevado la administración de la ciudad hasta los días de hoy.
Mirémoslo de otra manera…
¿Cuál es la imagen que atrae a los turistas y que siempre mostramos de Cartagena?
Pues la Cartagena histórica, la que se construyó antes de la independencia de 1811, la que hicieron los españoles.
¿Cuál es la ciudad que hay que esconder y que no se puede mostrar? ¿La que nos da vergüenza?
Pues la que construimos después de 1811 con malos materiales, de mala calidad, sin planificación, o con planificación pero planificación muy, muy miserable, ¿esa era la independencia que queríamos? ¡No! Pues no ha sido para nada mejor.
Entonces ¿qué carajos celebramos?
¿Qué tiene que festejar esa Cartagena de las comunidades marginadas que tuvieron que refugiarse en los extramuros hacia donde los expulso esa elite que los sigue mal gobernando y maltratando?
Alguien que me responda porque yo no acabo de entender.
Pero de las cosas que tengo claras es que uno no celebra una tragedia, y esta es una tragedia de magnitudes incalculables una tragedia en la que ya llevamos más de 200 años y contando.
¿Y del resentimiento qué? Ese como que si lo entiendo le decía yo al primo Jairo, ¿imagínate que todo el tiempo te han maltratado e ignorado? Y Cuando te dicen que hay que festejar pues sales por ahí a repartir barro y tierra que son los únicos materiales con que cuentas, te pones el disfraz de oprimido y sales a clamar por un protagonismo que nunca has tenido.
Ahora entonces….
Festeja cartagenero, festeja mientras esa élite que te oprime se va de vacaciones a otra ciudad para no encontrarse contigo.
Festeja cartagenero porque sabes que en estos días tienes licencia para odiar y destruir en nombre de una celebración trágica que no debería existir.
Se me olvidaba: Un 26 de noviembre como hoy, pero en el año de 1861, se adoptó la actual bandera de la República de Colombia.
¡Un abrazo!
Alvaro Royo
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