El Movimiento FUERZA CIUDADANA, promotor de la precandidatura presidencial de Carlos Caicedo Omar, exalcalde de Santa Marta y quien fue capturado por la Fiscalía, condenó su detención así como la del actual alcalde de esa ciudad, Rafael Alejandro Martínez, quien se encuentra suspendido por la Procuraduría General de la Nación.
La captura de Caicedo se dio cuando se disponía a viajar a Bogotá para la entrega en las horas de la tarde a la Registraduría Nacional del Estado Civil, de dos millones de firmas con las cuales formaliza su aspiración como candidato presidencial a las elecciones del próximo 25 de mayo. A su vez, Martínez fue detenido a la salida de una emisora local después de ser entrevistado por la mesa de periodistas.
Según ese movimiento político: «Todo está claro: en Santa Marta las viejas élites políticas, corruptas y patrimonialistas, que fueron desalojadas de la administración desde hace seis años por la voluntad popular con la victoria de Carlos Caicedo, abriendo una época de transformación y cambios en favor de la ciudad y de sus gentes, ponderada por propios y extraños; eso no lo perdonan por estar huérfanos de poder, y desde entonces, no han escatimado esfuerzos en torpedear y bloquear el cambio iniciado. Por eso, lo que no han logrado por la vía electoral lo quieren logar con trapisondas”.
En un comunicado señalan que “Hoy celebran alborozados la captura, el clan de los Cotes, quienes apoyan a German Vargas Lleras a cambio de “acabar” con Caicedo y Martínez. Pero no les durará mucho el regocijo; la ciudad entera sabrá reponerse del traspié, reclamando el debido proceso que permita la libertad tanto de Caicedo como de Martínez, quienes en todo momento estuvieron dispuestos para ser escuchados en la Fiscalía y no representan ningún peligro para la sociedad. Por lo anterior, es inentendible la forma grotesca e intempestiva como se procedió contra los dos mejores alcaldes que ha tenido la ciudad de Santa Marta”.
“Exigimos a la Fiscalía General de la Nación y a los jueces de la república la puesta en libertad inmediata de nuestros líderes, puesto que los mismos no tienen interés en obstruir la justicia ni mucho menos abandonar la ciudad; en los últimos dos meses Caicedo y Martínez habían asistido ante las autoridades judiciales para que fueran citados y escuchados pero siempre se les informó que no existía nada en contra de ellos.
Alertamos y convocamos a la ciudadanía samaria, la testigo de excepción de las transformaciones que hoy vivimos a movilizarse permanente y activamente para impedir que las élites politiqueras de Santa Marta y el Magdalena retomen la administración pública de Santa Marta.
¡El pueblo samario sabe muy bien quiénes son sus amigos y verdaderos líderes defensores de los intereses de la ciudad y de la comunidad!”
Finalizó proceso de recolección de firmas
Finaliza el proceso de recolección de firmas de Carlos Caicedo quien logró reunir 2 millones de firmas a su mensaje de anti política, equidad, transparencia y cambio. Las firmas, adicionalmente, fueron recogidas en el caribe lo cual se constituye en algo sin precedentes en la medida en que desvirtúa la creencia de que esta región es apática a nuevas propuestas políticas.
Cuatro etapas, siete ciudades capitales con sus respectivos departamentos, más 36 de los principales municipios de la Región, han sido recorridos por este bus, desde el cual el exalcalde de Santa Marta ha recaudado 2 millones de firmas que avalan su aspiración. Un inmenso caudal ciudadano que valora la propuesta de Caicedo, quien se ha desplazado al mando de un grupo de jóvenes visionarios del movimiento Fuerza Ciudadana, con quienes llegó a barrios marginados, mercados abandonados, calles empedradas y hasta puntos de encuentro de desempleados, entre otros rincones del litoral Caribe.
Carlos Caicedo ha sido el primer aspirante presidencial en llegar hasta esos sitios en modo presencial, sin necesidad de maquinarias políticas, impulsado por sus sueños, su convicción, sus ideales y sus propuestas, todo lo cual encaja perfectamente en el inmenso puñado de ilusiones y deseos de transformación de gente del común, que viene multiplicándose en cada una de las paradas.