Por César Pión González (Especial para Revista Zetta).- Cuando detallas el acontecer del diario vivir de nuestra ciudad encuentras en ella quien arroja el vaso a la calle, quien deposita su basura en los arroyos, quien no permite el paso de peatones en las cebras, quien compite en la fila de una registradora, quien no le da prioridad a niños, embarazadas y adultos mayores, quien deja morir los jardines frente a sus casas y negocios. Total, concluimos que pertenecemos a una Cartagena donde el convivir ha perdido identidad cultural. Este actuar de la vida diaria va reafirmando un perfil de que todo se puede, atrayendo ciudadanos de la misma o peor calaña.
Qué hacer, y es aquí en donde los teóricos, los oportunistas, los criticones argumentamos diferentes pensamientos concluyendo el accionar en la praxis en una de las teorías más impactantes en la historia de la humanidad que fue la denominada “autogénesis”, que solo bajo el poder de la palabra y la filosofía pudo en su momento definir que las cosas venían de la nada, lo que llamaron muchos “Teoría de la Generación espontánea”.
La que vivimos en nuestra ciudad donde los permisos para las ocupaciones y techados del espacio público, la construcción en zonas de parqueo, el cargue y descargue de camiones en horas hábiles, la invasión de terrenos públicos, las aguas de las mareas, son el resultado de una teoría ‘aristoteliana’; todo viene de la nada.
No hemos logrado que en los planes de desarrollo y en las discusiones de presupuesto se defina una propuesta concreta (resorte del alcalde por requerir de recursos) que conlleve al replanteamiento, rescate y aplicación de la Identidad cultural como conjunto de valores, tradiciones, símbolos, creencias y actitudes que nos motiven a trabajar en beneficios de la ciudad y a preparar el futuro de nuestras generaciones. Una identidad cultural que permita afianzar las emociones, los sentimientos y que logre el cumplimiento de las normas sociales bajo los valores, la tradición y costumbres.
Hoy estamos proponiendo una política cultural acorde a nuestra heterogeneidad poblacional, propia de los epítetos dados a la ciudad, el de la Unesco “Patrimonio Cultural de la Humanidad”y el del Congreso de la República: Distrito Turístico y Cultural. Es así como cursa en el concejo el acuerdo para institucionalizar más de 15 eventos en esta capital.
Por ejemplo el PARLAMENTO INTERNACIONAL DE ESCRITORES DE CARTAGENA DE INDIAS, que anualmente realiza en esta ciudad desde hace diecisiete años por la Asociación de Escritores de la Costa.FESTIVAL FOLCLÓRICO NACIONAL, FESTIVAL INTERNACIONAL MÚSICA Y DANZA DEL MUNDO EN CARTAGENA, que anualmente realiza en esta ciudadla Asociación Consejo Internacional de Organizaciones de Festivales de Folclor y Artes Tradicionales, Sección Nacional Colombia, TITIRIFESTIVAL CARTAGENA DE INDIAS, que anualmente organiza en esta ciudad desde hace tres lustros la ASOCIACIÓN DE ARTES TROTASUEÑOS.
Todo estos eventos son para que lleguen a nuestros sectores populares y podamos construir una política de cultura ciudadana que permita conducir la recuperación de la identidad y la pertinencia.