Cada aspirante a la Gobernación de Bolívar procura navegar en aguas mansas, pero las tormentas están en el “informe del tiempo” y son ineludibles.
A diferencia de la Alcaldía de Cartagena, donde muchos piensan en conformar un grupo para recoger firmas, para la Gobernación el asunto es más de alianzas entre grupos políticos. Quien logre armar mejor sociedad, podrá disputar con mayor ventaja la sucesión de Dumek Turbay Paz.
Los grupos tienen su expresión en el Congreso y los más fuertes son: Cambio Radical (Galvis-Padauí-Cure), Conservador (Blel-Arana y Montes), La U (García Zuccardi) Liberal (García Turbay), Centro Democrático (Araújo)
No hay ninguno de los actuales aspirantes que pueda decir que tiene el destino despejado hacia las elecciones de octubre y este es el panorama de los que hasta el momento han dicho que están aspirando.
Hernando Padauí: Sus “aguas mansas” están en el aval de Cambio Radical. No se divisa en el horizonte nadie que pueda disputarle ese privilegio, lo que lo dejaría instalado en el tarjetón de octubre. Tiene el respaldo de la senadora Daira Galvis, de los representantes Karen Cure y Jorge Benedetti, y en el partido de la U tiene el favoritismo de la exsenadora Sandra Villladiego y el actual representante Alonso del Río, quienes están haciendo fuerza para que esa colectividad le otorgue un coaval.
La tormenta está en el proceso que hace 10 años afronta en la Corte Suprema por la elección donde Germán Ordosgoitia asegura que la curul no debió ser para Padauí. Al propiciarse la segunda instancia en reciente reforma normativa, el proceso “despertó”, con el consiguiente ruido. En sus huestes hay tranquilidad porque todas las pruebas –aducen- le son favorables, mientras que en sus críticos y malquerientes, se trata del principio del fin.
Carlos Féliz Monsalve: Su tormenta está en el aval del partido de la U. Como acabamos de anotar, Sandra Villadiego y Alonso del Río quieren que el aval sea para Padauí. La exsenadora porque Padauí ha sido su aliado, y Del Río no le perdona que en el pasado debate Féliz haya votado a Cámara por el conservador Emeterio Montes. A su favor está que votó por el senador Andrés Felipe García Zuccardi, y que su padre, Juan José García, le tiene aprecio. Pero un asunto es el aval y otro el respaldo efectivo de campaña. ¿García le dará la orden a Del Río que desista de apoyar a Padauí a favor de Féliz? ¿Es cierto que Del Río no tiene “autonomía de vuelo”?
Si la tormenta arrecia por la U, a Carlos Féliz le quedan opciones en otros partidos, en un camino que está listo para ser recorrido.
Fejed Alí Badrán: Su tormenta está en obtener el aval del partido Liberal, y para ello tiene que convencer al senador Lidio García Turbay, y demostrar que no es ningún “pollo” sino un verdadero “gallo”. Además, no puede perder de vista que Luis Daniel Vargas está en el mismo plan, y que es un “gallo jugado”, como exgobernador y exjefe liberal de Bolívar.
Luis Daniel Vargas: Su tormenta está en convencer a Lidio García que, una vez gobernador, respetará su jefatura y no le montará competencia a Senado y Cámara, como lo hizo hace más de 12 años, cuando por poco es senador. Además, tiene el “cirirí” de la sanción de la Procuraduría que lo sacó del juego político por ese lapso.
Álvaro Redondo:La tormenta lo tiene casi naufrago. No se le ve en campaña, no se le ve fortaleza. No se le ve.
Jesús Payares Castillo: Su tormenta está en encontrar partido que lo avale. Si bien su hija, Verónica Payares, es Diputada por el partido Liberal, no se le ve cercano al senador Lidio García como para persuadirlo que le otorgue el aval. Otros partidos donde no tendría espacio serían Conservador, Centro Democrático, Polo y Verde, por lo que ASI u otro partido minoritario podrían ser su tabla de salvación. Quienes lo conocen, saben que es una hormiga trabajando la política, tal como lo ha hecho por más de 30 años, y que está metido de lleno en la provincia, así que no se descarta que se aventure a recaudar firmas.
Vicente Blel Scaff: Su tormenta está en decidirse. Su grupo político tiene la jefatura del partido Conservador con su hermana, la senadora Nadia Blel, y ese sería su aval. Militó en Cambio Radical, partido al que renunció al mismo tiempo que dejó su curul en el Concejo de Cartagena, y se ha dedicado a prepararse por lo que en el mundo político local todos lo dan como candidato, que destapará sus cartas después de Semana Santa.