Habitantes de la calle: ¿Qué está haciendo el Distrito?

Política pública, censo, hogares de paso y zonas de mayor incidencia son los principales interrogantes que formuló el Concejo Distrital respecto de la situación de habitantes de calle.

El concejal Wilson Toncel Ochoa presentó una proposición –aprobada por la plenaria- sobre el crecimiento descontrolado de los habitantes de la calle en Cartagena, sin claridad de las políticas públicas implementadas por el Distrito frente a esta problemática.

Las interrogantes los deberán despejar las entidades citadas: Secretaria de Participación y Desarrollo Social, Secretaría de Planeación Distrital y el Instituto Colombiano del Bienestar Familiar Seccional Bolívar.

En concreto, los interrogantes son:

  1. Cuál es el estado actual y el avance de las políticas Púbicas que se pretenden implementar por el Distrito para atacar la problemática de los habitantes de la Calle en la Ciudad de Cartagena?
  2. Se tiene identificado mediante un censo, con exactitud por lo menos hasta Diciembre de 2.018, de cuantas personas hacen parte de esta población denominadas habitantes de la calle en la Ciudad de Cartagena?
  3. Indíquese si a la fecha existe un lugar de paso contratado por el Distrito, con el propósito de atender a esta población.
  4. Cuáles y cuantas son las Zonas afectadas frente a la problemática?.
  5. Indíquese a esta corporación, cuales son las medidas urgentes que se han tomado por parte del Distrito para proteger a los menores de edad que se encuentran incluidos en la población de habitantes de la calle?
  6. Explique de existir, cuales son las políticas públicas encaminadas a la protección del medio ambiente, como quiera que en su mayoría los lugares de asentamiento de la Población de los habitantes de la calle, se han convertido en sectores con basureros satélites. Lo que afecta sin duda alguna el disfrute del Derecho Constitucional a un ambiente sano para todos los cartageneros y visitantes.

 

Según Toncel Ochoa,en los últimos años la ciudad de Cartagena ha tenido un aumento descontrolado y desproporcionado de los habitantes de calle, sin que se conozcan con claridad por parte de esta Corporación y de los Cartageneros,  las políticas públicas implementadas o a implementarse por el Distrito de Cartagena frente a esta problemática, que aqueja a gran parte de la ciudad y afecta no solo a los residentes, sino visitantes.

En su proposición señala que esta problemática ha traído consigo el aumento de la inseguridad, el microtráfico, plazas, parques y calles convertidos en baños públicos, y basureros satélites en sectores ya establecidos y reconocidos en la ciudad, como lo es Pie de la Popa, Pie del Cerro, Av. Del Lago, Getsemaní, Mercado de Bazurto, Centro, San Diego, Bocagrande, Transversal 54 a la altura del puente de Ceballos, Crespo, La Boquilla, entre otros sectores.

“De no atenderse de manera seria, rigurosa y constante a esta población y sus necesidades básicas insatisfechas, con unas políticas públicas urgentes y sostenibles a lo largo del tiempo, en cuanto a Educación, Salud y otras necesidades, gran parte de esta población, seguirá optando por elegir caminos indeseados cometiendo delitos como hurtos y tráfico de estupefacientes entre otros. Que se desencadenan en los índices de inseguridad que tenemos hoy en día en Cartagena de Indias, sumado obviamente a otros factores como el pandilismo y grupos armados entre otros”, dijo el cabildante.

Por otra parte existe una preocupación aun mayor, y es que dentro de ese grupo de personas, hay muchos menores de edad, en su mayoría sin padres, los cuales se dedican a pedir limosnas, algunos enfermos, otros sometidos a abusos sexuales y al consumo de drogas; situación que agrava más el panorama actual de la ciudad; ya que no se sabe cuáles son las políticas públicas implementadas o a implementar por el Distrito de la mano del Instituto Colombiano del Bienestar Familiar Seccional Bolívar,  encaminadas a lograr sacar de las calles a estos menores de edad, y lograr sean vincularlos a distintos programas educativos, de salud e incluso una vez rescatados de estos ambientes puedan ser incluidos en los programas de adopción mediante el Instituto Colombiano del Bienestar Familiar Seccional Bolívar.