Por Yolanda Wong Baldiris (Especial para Revista Zetta).- La imagen que circula en redes sociales y medios de comunicación que asegura que la población de Cartagena disminuyó con relación al año 2005, no es lo que se percibe en el día a día y tampoco coincide con la cifra que proyección del DANE Colombia, que de acuerdo a los estudios de Cartagena Cómo Vamos, la ciudad tiene 1’036.000 habitantes.
De ser cierta la información, es inaceptable que desde escritorios se quiera entorpecer el progreso que Cartagena necesita para superar la desigualdad y proyectarse a la par de otras ciudades del Caribe colombiano.
Pero, ¿Realmente qué implica para la capital de Bolívar tener más de un millón de habitantes?, sin duda, esto le daría a Cartagena la posibilidad de contar con un concejal más en la corporación pública, pasaríamos de 19 a 20. Asimismo, el ingreso proveniente de la tasa de medio ambiente manejada hoy por Cardique y que representa unos 50 mil millones al año, pasaría a manos del distrito.
De igual forma, tener más de un millón de habitantes influye altamente en las transferencias que el Gobierno Nacional hace a los municipios y distritos especiales como es el caso de Cartagena. En la misma línea, tendría el distrito la potestad para tener, manejar y administrar su propio catastro, lo que implicaría además la llegada de recursos gracias a la modernización y actualización de predios.
La cifra que se cita en la imagen de 887.946 habitantes para Cartagena, pretende desconocer una realidad de ciudad que es percibida por el ciudadano de a pie y que ante los ojos de estos es inaceptable, va en contravía del proceso migratorio que ciudades como la nuestra han tenido que afrontar como la llegada masiva de personas proveniente de países como Venezuela y que de acuerdo al último RAM (Registro administrativo de migrantes venezolanos) a corte 8 de junio del año 2018, en la ciudad habían cerca de 13 mil venezolanos, número que por supuesto ha aumentado masivamente y que según Migración Colombia hoy habrían unos 30 mil ciudadanos asentados en barrios y corregimientos como El Pozón, Nelson Mandela, San José de los Campanos, Bayunca y Pontezuela. Sumado a esto la población desplazada y víctimas de la violencia, radicadas en comunidades como Colombiatón, Villas de Aranjuez y Ciudad del Bicentenario.
Si la información es correcta, invito a quienes como yo tienen la intención de someterse al ejercicio de la democracia para dirigir los intereses de los ciudadanos cartageneros, a que en bloque, sentemos una voz de protesta firmada y dirigida al DANE para que aclare tal situación y exigir el respeto que nuestros ciudadanos merecen.
Desconocer la población de Cartagena es desconocer sus problemas, por lo que pido al DANE aclaración del tema lo más pronto posible.