Por César Pión González (Especial para Revista Zetta).- Cartagena Patrimonio Mundial Cultural y Natural con la denominación de “Puerto, Fortaleza y Conjunto Monumental de Cartagena de Indias”. declarada Patrimonio Histórico de la Humanidad por la UNESCO, se ha convertido en uno de los atractivos turísticos más visitados en la costa caribe, sin embargo el hecho de ser capital de uno de los departamentos con mayor extensión geográfica de grandes distancias entre sus municipios y de gran complejo acuífero montañoso, posibilito la explotación ilegal minera , siembra de cultivos ilícitos y presencia de actores de conflictos políticos y delincuenciales los cuales incidieron en el desplazamiento de muchos de sus habitantes desde las fronteras del bajo Antioquia, magdalena medio, Santander, sucre, centro y sur de bolívar a la capital cartagenera. El crecimiento poblacional sin ampliación de la universidad pública y la no formación técnica afín a los potenciales de desarrollo económico como la industria y el turismo, han acrecentado el desempleo y la informalidad laboral, construyendo por inercia una ciudad de subsistencia en donde el comportamiento colectivo ha sido descuidado , priorizando el dominio del territorio desde la óptica del poder con herramientas coercitivas desde la política, justicia, economía y la fuerza mayoritaria o individual que ha acrecentado en la ciudad la intolerancia y la agresión física, verbal y psicológica .
Conceptuaba en una de sus columnas la cartagenera Finita de Benedetti de las altas esferas sociales pero de gran espíritu cívico “Cultura ciudadana es la agrupación de comportamientos, valores, actitudes y normas que ayudan a tener sentido de pertenencia, facilitando la convivencia entre la ciudadanía y generando respeto entre la gente y respeto al patrimonio común, generando colaboración entre las personas y las instituciones para el bienestar colectivo” de igual forma afirmaba BERNARDO ROMERO PARRA hombre de las esferas humildes y luchador social “No nos cansaremos de conceptuar que para lograr la transformación socio integral de Cartagena, uno de los elementos esenciales para su consecución es la ejecución de un plan de cultura ciudadana que tenga como objetivo formular, concertar, coordinar y realizar acciones para promover el respeto a: la vida, los derechos de los vecinos, las reglas sociales, normas legales, costumbres y tradiciones en el distrito de Cartagena con el fin de mejorar los niveles de comportamiento de los habitantes a través de procesos pedagógicos colectivos”.
Dos ciudadanos de convivencia social distinta apuntan a gritos el deseo de una pedagogía paralela y sostenible al ejercicio de los gobiernos que nos permita a esta población heterogénea, sin sentido de pertenencia regresar desde una óptica moderna al símil de la urbanidad de Carreño. Razón por la cual solicitamos al alcalde contemple en su plan de desarrollo el proceso de cultura ciudadana.