Por Álvaro Royo (Especial para Revista Zetta 20 años).- (Xiamen – China).- Hace muchos años estuvo en carteleras de cine una película protagonizada por Michael Douglas, Katheen Turner y Dany De Vito, dirigida impecablemente por este último llamada La Guerra de los Rose, que trata en resumen de la degradación y el apocalipsis que se vive cuando una relación matrimonial se marchita de tal forma que hacerse daño el uno al otro es todo el argumento con que se cuenta para tratar de imponerse.
Hablaba con un amigo de Cartagena hace unos días y me decía que el tema del enfrentamiento entre la Alcaldía y el Concejo está bastante delicado, agregaba yo que somos nosotros extremadamente afortunados que la vida nos dé la oportunidad de presenciar semejante espectáculo, ya que es un enfrentamiento histórico, de cambio, de lucha, de un choque de fuerzas con visiones diferentes, y esto está, le dije, no solo para alquilar balcón si no que toca comprar Coca Cola y críspetas porque va a ser de mucho suspenso y un final impredecible.
La institucionalidad y la legalidad con que ambas partes cuentan al haber sido elegidas por voto popular las legitima y las ubica en igualdad de condiciones, por eso cada uno de sus argumentos tiene valor y ninguno debe ser desestimado.
Quiero dejar claro también que en mi opinión mando yo, y es por eso que lo que expreso aquí solo tiene que ver por como yo veo las cosas y no trato ni aspiro en ningún momento a interpretar el sentir de ninguna de las partes en discordia.
Tampoco me voy a poner a analizar quien tiene o no la razón, eso ya podríamos analizarlo en otro artículo, pero no en este.
Dicho lo anterior paso a decir que lo que yo veo aquí es que cada uno se siente más legítimo que el otro, esto es fácil detectarlo por las declaraciones y acciones que viene de lado y lado, están apostando ambos por la desaparición física del contrario, cosa que solo existiría en una utopía, no es posible que pueda funcionar la Alcaldía sin el Concejo y tampoco que pueda hacer algo el Concejo sin la Alcaldía, uno existe porque existe el otro, son como dos siameses unidos por la barriga y con un solo corazón que indiscutiblemente tienen que aprender a convivir, porque en este enfrentamiento de pareja despechada solo pierde la ciudad y lo más interesante y que no se les puede olvidar a ellos es que en esta relación el divorcio no es una opción, no existe, no es posible.
Profundizar el enfrentamiento solo va a radicalizar a ambas partes y la paralización administrativa que vendrá como consecuencia de esto va a ser devastadora para una ciudad donde todo está por hacer.
Con la ciudad paralizada van a perder ambos y van a arrastrar de paso a la ciudad con ellos, quedaran como perdedores y sus aspiraciones políticas a futuro se van a ver bastante afectadas, en cambio sí se concentran en la frase “en Cartagena todo está por hacerse” podrán visualizar que con la cantidad de obras de infraestructura y de todo tipo que hay que hacer esta no es una oportunidad de oro la que están perdiendo, es de diamante, y en esa transformación es donde va a haber un gana gana para todos incluida Cartagena.
Catapultarán ambas partes sus carreras políticas con proyección no solamente local sino nacional y pasarán a la historia como los nuevos libertadores, sus nombres serán recordados eternamente por generaciones, lo cual poca cosa no es, pero esto no se construye con una ops por aquí y otra por allá, esto se construye con macro proyectos que toquen todos los tejidos sociales de la ciudad con licitaciones limpias y transparentes que prioricen a las empresas y la mano de obra local y así se beneficiaran todos.
Seguirse mostrando los dientes no va a traer ningún beneficio y el tiempo juega en contra de ustedes porque la ciudad está claro que está dando un compás de espera, y ellos, la ciudadanía, va a medir su gestión solo con resultados que puedan sentir y tocar, no con titulares de prensa ni declaraciones descalificadoras.
Y los temas que tenga cada uno que resolver con la justicia déjenselo a la justicia, para eso está ella, y para eso existe la separación de poderes.
Le sugeriría a la Alcaldía y al Concejo que dejen los guantes de boxeo en su casa, salir de allí con buena actitud y energía, vestidos con el overol, con ropa de trabajo, a gestionar y a transformar la ciudad, Cartagena los necesita y los está esperando, no nos vayan a quedar mal esta vez por favor.
Y si quieren seguir con el enfrentamiento entonces váyanse a dar una vuelta por la zona sur oriental para que vean la miseria, el hambre y el abandono de esas comunidades que están esperando por ustedes….
Como siempre allí está mi email al pie de página para los que quieran escribirme sus opiniones acerca del tema y con mucho gusto les responderé,
¡Un abrazo!
Álvaro Royo Bárcenas
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