¿Por qué el rescate a los bancos es en billones de dólares y el rescate al ciudadano es en miserables mercaditos? – Opinión de Álvaro Royo Bárcenas desde Xiamen

Por Álvaro Royo Bárcenas (Especial para Revista Zetta 20 años).- (Xiamen – China).-  Ve uno los planes de migajas diseñados desde el gobierno nacional para rescatar al ciudadano, si, migajas miserables que contrastan con los billones de dólares que se les entrega a la banca cuando esta está en problemas.

Y lo más especial es que el rescate de la banca lo pagan al final el ciudadano, y cuando estos mismos bancos rescatados muestran utilidades no se acuerdan de socializar esas ganancias con ellos, es el típico gana pierde en el que nos tienen desde que se inició la fiesta de desregulación del sistema financiero en épocas de Ronald Reagan que luego siguieron Bill Clinton, George Bush y la lista sigue.

Si, porque ahora más que nunca se le ven las costuras a esa teoría económica de Adam Smith en la cual la mano invisible del mercado mueve, controla y regula la economía, qué carajos va a regular el mercado cuando son compañías poderosas en las cuales solo valen los números y los saldos a favor y a final de año, el ciudadano es un número más y llevárselo por delante si esto representa beneficios les da igual.

¿Por qué a los bancos sí y al ciudadano no? Ver con rabia y una infinita piedra con síntomas de pre infarto es lo que siente uno ver como empresas que tienen 10,  20, 30 o 50 años funcionando con números de beneficios y ganancias ridículamente altos no puedan sostener una planta de empleados por varios meses, no se explica uno que en menos de 50 días de cuarentena el desempleo pueda estar tocando los 2 dígitos ya, y que estas mismas empresas no sean capaces de sacar de sus cuentas dinero para solidarizarse con el empleado, con su país y devolver en unos pocos meses un poquitico de esos trillones que se han ganado en todas estas décadas.

Y no hablo del pequeño restaurante o de empresas pequeñas, hablo de los grandes capitales que emplean millones de personas en donde te puedes hacer una idea si sus nóminas vales miles de millones mensuales, ¿de qué tamaño serán sus utilidades anuales?

Aquí en este escenario es donde las teorías de Adam Smith y su mano invisible pero perversa del mercado se vuelven un colador, y sus enunciados de un Estado pequeño y regulador se arrastran por el piso y quedan sin validez porque un Estado pequeño no puede regular un reverendo carajo,  porque un Estado pequeño donde sus políticos y dirigentes han sido elegidos por esas mismas empresas van a legislar y actuar servilmente para ellas y en contra de los intereses de la mayoría de individuos de ese Estado.

Ridículo, mezquino y aberrante por decir las palabras más decentes que tengo a la mano, es el accionar de ese gran capital para el que el ciudadano es un puto número que tiene que girar alrededor de los intereses de ellos.

El estado tiene que tomar nota, sí, pero en este momento los que representan al estado representan a esas empresas que solo saben chupar y chupar y no cuentan en su diccionario con la palabra donar, solidarizar, en ultimas dar.

Eso no es posible dentro de sus códigos anti éticos que solo cuentan en metálico, no en carnes y huesos, esas empresas están viendo el estallido social que se puede venir encima por cuenta de sus medidas criminales de despidos para minimizar gastos y presionan a sus subordinados, los políticos que ellos pusieron allí para que a costa de vidas pongan a andar la economía, esa que ahora hace agua y ellos ¿qué hacen? se apartan, se agachan y miran para otro lado de manera desvergonzada, para ellos es  mejor contar y sumar muertos que reducir ganancias.

Que viva Adam Smith, sí, pero que viva lejos de nosotros, el estado ahora es quien debe salir a solucionarles el marrón a todos ellos, ese estado pequeño e ínfimo que siempre han pedido es el que quieren ahora que sea lo suficientemente robusto para taparles su descaro.

Repitiendo lo mismo para poner el punto sobre la i, cuando los bancos quiebran el estado corre a rescatarlos y el ciudadano paga la cuenta,  y ¿por qué ahora el estado no corre a rescatar al ciudadano?  ¿Por qué los rescates a los bancos se cuenta por billones de dólares y por qué el rescate del ciudadano tiene que ser en mercaditos miserables de harinas refinadas y laticas de atún llenas de poli fenoles cancerígenos?

¡Váyanse mil veces para el puto carajo!

Pero aquí estamos, viendo cómo se derrumba todo y ahora todo paralizado hasta el 30 de mayo, si 34 días más de incertidumbre y hambre donde aún las consecuencias están por verse y donde lo importante es que se siga manteniendo el sistema piramidal Ponzi del sistema financiero actual donde sus directivos viajan en yates, helicópteros y aviones privados que no los deja ver más allá de sus narices, porque las ganancias y utilidades son sagradas, eso no se toca.

No está de más seguir repitiendo que acá en China ya todo ha vuelto a la normalidad, hace una semana ya abrieron lo último que faltaba, colegios, universidades, discotecas y bares, eso sí, tapabocas obligatorio, toma de temperatura en todos lados y aplicación de seguimiento satelital para ir aislando a posibles casos asintomáticos.

¿Cuando va Colombia a mirar para Taiwán y Corea? Países que aplicaron las medidas que ni siquiera le hicieron entrar en cuarentena total y que ahora en China están funcionando.

Como siempre allí está mi email al pie de página para los que quieran escribirme sus opiniones acerca del tema y con mucho gusto les responderé

¡Un abrazo!

Álvaro Royo Bárcenas

Xiamen-China

enchina@gmail.com

www.alvaroroyo.com

Twitter: @Alvaro_E_Royo

0086-13559231344