La victoria de Carlos Mendivil sobre Eduardo Piñeres en 1991 marcó el inicio de la elección popular de Gobernadores en Bolívar, pero también una constante en nuestro villorrio: siempre ha habido dos candidaturas fuertes, nunca una tercería significativa.
Pasó con Miguel Navas, que le ganó a Eduardo Espinosa; o Miguel Raad, que derrotó a Alberto Barboza; o Luis Daniel Vargas, que doblegó a Enrique Segovia; o Libardo Simancas que superó a Alfonso López Cossio, quien también cayó de nuevo ante Joaco Berrío. El dato más reciente es el de Rosario Ricardo que sucumbió ante Juan Carlos Gossaín. ¿se acuerdan de un tercer candidato con votación o propuestas dignas de evocar?
Este dato es importante tenerlo en cuenta ahora que se asoman los nombres de quienes seguramente dominarán el panorama noticioso con sus candidaturas para reemplazar a Juan Carlos Gossaín.
De momento –noviembre de 2014- hay un nombre que está en la cresta de la ola y tiene alto reconocimiento y recordación: Dumek Turbay Paz.
El hecho de haber estado ocho años al frente de Iderbol, ente que pasó del borde de la liquidación a un esplendor sin antecedentes, le significó un permanente contacto con comunidades, medios de comunicación y dirigencia deportiva y política. Es el candidato más fuerte hoy.
William García Tirado fue concejal de Cartagena y Representante a la Cámara en llave con Javier Cáceres Leal; decidió no buscar la reelección en el Congreso sino la Gobernación. Partió cobijas con Cáceres y viene trabajando desde la fundación Todo por Bolívar para hacer que su nombre siga vigente en los municipios. Hoy sería ese segundo candidato con posibilidades de disputar el premio mayor.
¿Habrá espacio para una tercería? La lógica indica que Dumek seguirá en campaña, esperando el mes de marzo para pisar el acelerador, y buscando nuevas alianzas políticas entre tanto. Sus enemigos dicen que “no pega” y que su candidatura será desmontada ante otra emergente y hasta ahora desconocida, pero sus amigos lo ven con bríos suficientes, además tiene el liderazgo, la convicción y argumentos para aspirar. Es el candidato liberal, respaldado por el senador Lidio García. (A riesgo de que me rectifiquen, de momento también es el candidato del gobierno, pero eso no se puede decir, porque en Colombia, en teoría, los gobernantes son neutrales) (En whatsapp todos contestarían: jajajajajajajaja)
Algunos creen que habrá un “To-con-du” (Todos contra Dumek); de ser así, ¿quien será el que encabece esa “chagua”?
William García Tirado es hábil e inquieto, se documenta, tiene su propio capital político y viene trabajando en dos frentes: en el abierto, con su fundación, y en el cerrado, en contacto con los líderes políticos de cuya hipotética unión se prohijaría la otra candidatura fuerte.
¿Y los demás? A un año de las elecciones hay tiempo para que surjan otras aspiraciones. Se habla del abogado José Julián Vásquez, pero su intermitencia emite una señal débil o, por lo menos, incierta. Hace tres semanas, en entrevista con Germán Teherán de La Verdad y Punto, dijo que era candidato. Desde entonces nadie ha vuelto a verle u oírle en ese plan. Personalmente le he buscado, enviado mensajes, acudido a amigos comunes, pero parece que después de agitar el avispero, se ha dedicado a analizar el efecto de su pronunciamiento desde la torre del Nautilus.
Hay otros nombres que se barajan, pero es mejor esperar a que se decidan a mostrarse.
Parece que habrá que esperar a que despunte el 2015 para ver cómo se desenvuelve la madeja. Todavía no se muestran con claridad los movimientos de las distintas casas políticas. ¿Qué harán García-Zuccardi, Blel, Montes-Curi, Rangel-Villadiego, Galvis, Pereira, Padauí…?
Por lo menos, el jefe de una de esas casas me dijo: ¡hablamos en marzo!