La Mesa Directiva del Concejo lo único que tiene seguro es denuncias e investigaciones por la decisión que tome: sea que posesione, sea que no, al cuestionado electo contralor Héctor Consuegra Salinas.
Mientras los demás concejales se refugiaron en que “los asaltaron en su buena fe”, varios de ellos les dieron a entender que “ese problema es de ellos”.
El problema lo tienen el presidente David Caballero y los vicepresidentes Gloria Estrada y Luis Cassiani.
Varios de los que votaron por Conseuegra señalaron que no hay otro camino que darle posesión, como lo señaló Lúder Ariza, del partido Alianza Verde, colectividad declarada de apoyo al gobierno de William Dau.
Fue precisamente el alcalde quien nombró en febrero pasado a Consuegra como asesor de control interno de Edurbe, empleo que venía desempeñando al momento de la elección.
Todos los concejales han dicho que no sabían que Consuegra era empleado de Edurbe, y de allí que sostengan que fueron asaltados en su buena fe.
De saberse esa condición, cada cual hubiera sopesado si, aún así, era merecedor de los ocho votos que le bastaron para ganar el cargo por la mínima diferencia.