Peatonalización del Centro Histórico: una necesidad – Opinión de Wilson Toncel

Por Wilson Toncel Ochoa (Especial para Revista Zetta 20 años).- El Centro Histórico de Cartagena es la joya de nuestra ciudad. El punto donde convergen e interactúan dinámicas y sectores de la vida productiva que mantienen en marcha la economía de nuestra ciudad. Discotecas, bares, restaurantes, hoteles, plazas públicas, atractivos turísticos como la arquitectura colonial, lugares para eventos de todas las magnitudes, entre muchas otras cosas son las que se puede encontrar un turista en una sola fracción de nuestra ciudad al llegar a ella.

En nuestra ciudad todo el año es temporada turística, en cualquier fecha y a cualquier hora uno se puede encontrar un grupo de turistas abrumado por la cantidad de posibilidades tratando de definir qué actividad hacer. Panorama que lastimosamente, con el llegar de la pandemia por SARS-CoV-2, se redujo drásticamente, dejando calles desiertas que, con anterioridad, a veces se volvían intransitables.

La reactivación paulatina que estamos viviendo justo en estos momentos ha dado un respiro a los comerciantes que se veían ahogados en la desesperanza de ver sus negocios vacíos. Sin embargo, esta alegría no ha sido completa en el sector de los lugares de consumo de bebidas y alimentos. Quienes están viendo la luz al final del túnel son los propietarios de bares y restaurantes que cuentan con espacios al aire libre como azoteas y terrazas, quienes, con esta ventaja, cuentan con todos los requisitos para reabrir sin problemas sus negocios.

Por lo que hoy quiero volver a poner sobre la mesa un debate que se viene dando desde hace muchos años. Un debate que ya es hora de que pase de palabras a la acción: la peatonalización del Centro Histórico. Un proyecto que se ve más necesario y viable hoy día con la llegada del COVID-19.

A nivel internacional existe una tendencia a la peatonalización que, con la llegada del virus y la necesidad de más espacios abiertos, se ha incrementado. Ciudades como Ámsterdam en Países Bajos y New York en Estados Unidos se han sumado a la iniciativa y han reportado grandes beneficios para el comercio cuando se le otorga más espacio para libre circulación a la ciudadanía.

Otorgarles espacios a comercios que no cuentan con zonas abiertas para atender a su publico permitiría que se dinamice más la economía, y le daría un respiro a muchos comerciantes y trabajadores que no han podido reanudar actividades. En el año 2014 en el Concejo Distrital de Cartagena de Indias aprobamos el acuerdo 010 del 4 de agosto, por el cual se estableció un marco regulatorio para el uso temporal o eventual del espacio público y su aprovechamiento económico por parte del Distrito, lo que representaría un gran recaudo para sus arcas. Esto sería la herramienta ideal para que se beneficie toda la ciudadanía.