En la plaza de toros de Juriquilla, (Querétaro – México), José Tomas reapareció más de un año y ocho meses después de su anterior paseíllo. Compartió plaza, triunfo y emociones con Fernando Ochoa, quien se despedía de las plazas. Ambos salieron en hombros -tres orejas Ochoa, dos José Tomás-, si bien fue el torero español quien dejó el mensaje más grande de la tarde. Todo con una corrida de Fernando de la Mora, que lidió dos toros de arrastre lento y Los Encinos, correctamente presentada y con opciones en líneas generales. La pasión la terminó por completar el público, que abarrotó el coso mexicano y que supo seguir la tarde emocionado, alternando profundos ‘oles’ con silencios de respeto y entrega.
A José Tomás pareció no pesarle la reaparición. Cumbre al natural y suave en grado sumo en sus tres toros, se ganó pronto el triunfo, pues ya desorejó al primero. Templado, cadencioso, con marcada solemnidad en todas las fases de sus lidias, el espada madrileño evidenció todo esto aún más al romperse a torear en el quinto. Fue en ese toro donde la tarde alcanzó nivel superior -más allá de números-, con una labor excelsa y que podría ser un ‘aviso’ ante su cercana vuelta a España. Si su cuenta de trofeos se quedó en las dos orejas del ‘abreplaza’ fue porque a ese quinto toro lo pinchó. Tenía cortado el rabo, pero la espada se atravesó repetidas veces. Entre medias se las vio con un astado más deslucido, el tercero, a cuya lidia paciente y técnica pareció no darle tanta importancia el público.
Fernando Ochoa se despidió de los ruedos y lo hizo dándolo todo. Ante su amigo y compañero español, el torero mexicano se ganó el triunfo compaginando buen toreo con entrega absoluta. Ochoa ya logró una oreja del emocionante cuarto toro y certificó su triunfal adiós con las dos del séptimo, un buen sobrero de regalo. Ahí, pese a las protestas del público por su trapío, se quitó las malas sensaciones que hubiera supuesto una retirada triste por culpa del mal sexto toro.
Al final, dos amigos, dos toreros, compartieron triunfo mientras intercambiaban un hola y adiós a las plazas de toros.
FICHA DEL FESTEJO: Plaza de toros de Juriquilla. Lleno. Toros de Fernando de la Mora (3º, 5º, de arraste lento, 6º y 7º, este de regalo, también de arrastre lento) y Los Encinos (1º, 2º y 4º), correctos de presentación y con opciones en líneas generales. Peor el sexto. José Tomás, que reaparecía, dos orejas, ovación y vuelta al ruedo y Fernando Ochoa, que se despedía, ovación, oreja, silencio y dos orejas.
