El Personero de Cartagena le insistió al Presidente de la República sobre la importancia que tienen las 1.102 Personerías Municipales del país para el posconflicto.
Personero: ¿cuál es el reclamo que Usted le hace al Presidente Santos?
A los personeros del país nos preocupa que cuando el señor presidente se refiere a la paz territorial, jamás hace alusión a las Personerías. Esto es preocupante porque somos los primeros defensores de los derechos humanos en todos los 1.102 municipios del país. El señor Presidente tiene que replantear su discurso y en la reglamentación que va a dictar con base en las facultades entregadas por el Congreso, debe incluir recursos para las Personerías del país, porque nosotros somos la puerta de ingreso de las víctimas a la institucionalidad.
Estamos esperando a que el presidente nos invite formalmente a participar de todo este proceso de implementación de los acuerdos de paz en todo el territorio nacional. La paz tiene que se incluyente.
Las personerías son vitales para la paz, y sin estas la mesa de la paz quedaría coja.
¿Este acuerdo Santos-Farc cuando se traducirá en verdadera paz?
No vamos a alcanzar la paz plena con lo que se va a firmar entre el gobierno y las Farc, pero si podemos conseguir que los niveles de violencia en el país se reduzcan notoriamente.
Vamos a empezar un proceso de implementación de los acuerdos que, tal como están dados en lo político y social, van a mejorar la calidad de vida de todos los colombianos.
En lo agrario se va a mejorar la seguridad alimentaria, la seguridad laboral de los campesinos y va a haber una reparticipación equitativa de la tierra, sin arrebatarle la propiedad a los que la tienen de manera clara, es a los terrenos baldíos, a los que se le han quitado a los narcotraficantes, y eso es importante.
¿Cómo repercute este acuerdo en las víctimas que hay en Cartagena?
En Cartagena ha aproximadamente 130 mil víctimas. Ya existe la ley 1448 de víctimas donde se establecen unas medidas claras. Recuerde que en este acuerdo se ha introducido la justicia transicional con verdad, justicia y reparación a las víctimas, y garantía de no repetición a las víctimas. Yo veo con muy buenos ojos que el gobierno nacional haya hecho este acuerdo con las Farc y que le haya dado legitimidad mediante un plebiscito.
¿El No es volver a la guerra?
Yo no lo veo así. Lo que sucede es que hay dos maneras de ver el acuerdo: de manera individual o de manera integral.
Si usted mira de manera individual y no le gusta uno de los puntos, es posible que usted vote no. Pero esa es una situación que debe examinada por todos los ciudadanos. Lo que pasa es que el gobierno hizo que se vote en bloque todo el acuerdo, de manera integral, y si usted lo examina de manera integral, puede votar si.
Una paz sin inversión social o una paz sin verdadera justicia, no es paz…
Ese es uno de los aspectos que más le preocupa al pueblo colombiano, porque el presupuesto de la Nación no se estira. Se requiere el apoyo de los países amigos comprometidos con la paz, porque la paz de Colombia es en gran medida la paz del mundo.
¿Usted cree que este clima de paz redundará también en la vida cotidiana de los ciudadanos?
Hay mecanismos de solución de conflictos que ya están en la ley, pero el gobierno nacional el puso talanquera s a los centros de conciliación en las Personerías, pues no cuentan con los recursos. El tema de la paz territorial debe ser mirado de manera integral.
Los conflictos entre vecinos son solucionables con un centro de conciliación en la Personería. Hoy estoy estudiando los requisitos para implementarlo, pero no tenemos presupuesto.
Entonces los jueces de paz se crearon estérilmente…
Precisamente voy a llevar al Concejo un proyecto de acuerdo para elegir a los jueces de paz en Cartagena.
Estamos hablando de jueces de paz y centros de conciliación en la Personería, lo que va a mitigar la violencia local, pero el otro aspecto es la inversión social con calidad. Mientra no haya buena educación, o salud, la paz va a estar firmada con las Farc pero no se concretará en los barrios como la deseamos. Debemos concretar aquellos aspectos que hoy vienen siendo generadores de conflicto social por fuera del conflicto armado, para ir construyendo de manera integral la paz que anhelamos todos los colombianos.