Todos queremos la paz, pero esta paz sin que los responsables de los delitos más atroces paguen un día de cárcel, lo que hace es que estimula la violencia y Cartagena ya lo está viviendo.
Un ejemplo claro es el secuestro y asesinato de los diputados del Valle. Los responsables los tuvieron en la selva por varios años, y luego los mataron a sangre fría con tiros de gracia. Esos señores no pagan un día de cárcel con solo reconocer esos hechos, y enseguida pueden ser candidatos a la Asamblea del Valle del Cauca, y pueden ser representantes o senadores sin sacar un solo voto, y los colombianos con más impuestos tendremos que pagarles salario y sostenimiento de su partido político, darles 31 emisoras en FM, reconocer todas esas prebendas en condiciones preferenciales contra todos los partidos, les van a ofrecer 16 curules en áreas donde tienen influencia, con lo que podrían llegar a tener hasta 26 congresistas, y todo eso lo que genera es más violencia.
El Eln y las bacrin, que tiene influencia en Bolívar, cada día demuestran su accionar violento y que mañana sencillamente se pondrán un ropaje ideológico para reclamar las mismas prebendas de las Farc.
No solamente se estimula la violencia sino que quieren llevar al país, paso a paso, al castrochavismo con la agenda impuesta por las Farc.
Juan Manuel Santos es un hombre mentiroso; dijo que no iba a poner más impuestos y en pocos días le va a poner impuestos al arroz, a la carne, a la yuca, a la leche, a los bienes básicos de la canasta familiar, inclusive a las pensiones.
Es un hombre que ha dicho que este proceso no tiene reversa, entonces porqué va a amenazar al pueblo colombiano diciendo que viene una guerra si se vota el No, eso es mentira. Hasta Carlos Lozada, de la cúpula de las Farc, ha dicho que aunque gane el No, ese grupo va a seguir buscando la paz, entonces no podemos creeerle a Santos, que siempre miente para engañar al país y conducirnos a la agenda socialista que nos quieren imponer.