Entre el 7 y el 16 de abril de 2017 se registraron un total de 19.720 visitantes en las Fortificaciones de Cartagena de Indias, un 75 por ciento más que la cifra alcanzada en la Semana Santa de 2016.
Así lo reporta la Escuela Taller Cartagena de Indias (ETCAR), entidad designada por el Ministerio de Cultura de Colombia para la administración de estos bienes patrimoniales, la cual indica que el día en que más visitantes se recibieron fue el Jueves Santo.
Luis Ricardo Dunoyer González, director general encargado de la ETCAR, asegura que “estamos muy satisfechos con el balance logrado en esta Semana Santa porque esta cifra récord de visitantes significa que más colombianos y extranjeros están conociendo nuestros sitios históricos que son Patrimonio de la Humanidad y por tanto pueden convertirse en aliados para la conservación de los mismos”.
Agrega que a esta gran cantidad de visitantes se les pudo atender adecuadamente gracias a un plan preparado en conjunto con la Alcaldía Mayor de Cartagena de Indias para esta temporada, el cual incluyó controles de espacio público, campañas de divulgación y toma de medidas para garantizar la conservación de las fortalezas existentes en la ciudad.
Opiniones de visitantes
Uno de los miles de visitantes que recibieron las Fortificaciones de Cartagena durante esta temporada fue Jorge Eduardo Vega, quien cuenta: “Vine desde Jamundí (Valle del Cauca, Colombia) a visitar la hermosa Cartagena de Indias después de 25 o 30 años de no venir y lo que encuentro es una ciudad cambiada. El Castillo de San Felipe, por ejemplo, está en perfectas condiciones y entrar a los túneles de este monumento es transportarse en el tiempo, así que felicitaciones a Cartagena”.
Diana Fernández, por su parte, llegó desde Puerto Rico y comenta sobre su experiencia: “el Castillo de San Felipe de Barajas es un sitio recomendado ya que es parte de la historia de la ciudad y me pareció muy bueno porque en mi país también tenemos una fortificación que es muy parecida y esto me hizo sentir como en casa”.
La ETCAR invita a cartageneros y visitantes a que continúen acercándose a las Fortificaciones de la ciudad y se conviertan en guardianes de las mismas para lograr que se mantengan en condiciones que permitan a las generaciones venideras la oportunidad de disfrutar de tal riqueza patrimonial.