Las afirmaciones categóricas deben ceder ante el interrogante, habida cuenta de las sucesivas decisiones judiciales que han hecho de la cuarta curul de Cambio Radical la más disputada de la historia del Concejo de Cartagena.
No se puede afirmar nada porque enseguida todo cambia. Un día Carlos Barrios Gómez es concejal, al otro es desvinculado, luego una tutela entroniza a Wilson Toncel Ochoa, luego otra tutela repone a Barrios, derecho de petición va, solicitud de reposición viene… y ahora… dos decisiones con efecto adverso para Toncel.
La más apremiante es la tutela que le quita la curul a Toncel y se la vuelve a entregar a Barrios, pues el juez penal noveno del circuito con funciones de conocimiento le respondió a Lewis Montero, presidente del Concejo, que su orden es clara: tiene 48 horas para reintegrarlo.
El juez no le contestó si con esa decisión contrariaba la otra tutela en juego, la que le reconoció derechos fundamentales a Toncel y le ordenó a Montero posesionarlo como concejal.
El problema para Montero es que si acata la nueva tutela, entonces podría estar en los terrenos del desacato con la anterior. Mejor dicho, pierde con cara y pierde con sello.
La segunda decisión adversa para Toncel es la que lo separa de la curul por orden del Tribunal Administrativo de Bolívar.
Esa entidad admitió una demanda de nulidad electoral entablada por Barrios contra el acto de llamamiento a ocupar la curul por parte de Lewis Montero a Wilson Toncel.
En la admisión, el Tribunal concedió una medida cautelar: suspender el acto administrativo con el que Montero acató la tutela que entronizó a Toncel en esa curul. En otras palabras, lo sacan del Concejo “hasta tanto se defina la situación contenciosa administrativa”, es decir, hasta que resuelvan la demanda… y eso se toma su tiempo.
Pero así como Barrios ha descargado su artillería jurídica –recordemos que también entabló acciones ante la Auditoría Nacional para desmontar el fallo de responsabilidad fiscal de la Contraloría Distrital, que lo dejó fuera del Concejo, y tiene denunciada penalmente a la contralora Nubia Fontalvo- Toncel también tiene lo suyo.
Toncel tiene una tutela en firme (en primera y confirmada en segunda instancia) y esta medida cautelar del Tribunal Administrativo es una decisión que ataca esa tutela. ¿está facultado este organismo para hacerlo? ¿hay tutela contra tutela y medida cautelar contra tutela?
Es un verdadero galimatías jurídico que tiene al presidente del Concejo, Lewis Montero, como toro en corraleja: no sabe a qué mantero embestir, porque lo azuzan por todos los frentes.
Vea aquí: Decisión del Tribunal Administrativo de Bolívar
https://issuu.com/revistazetta/docs/barrios_-_trib_adm_vs_toncel
Vea aquí: Respuesta de Juez Séptimo Penal del Circuito a Lewis Montero
https://issuu.com/revistazetta/docs/barrios_-_tutela_ii_respuesta
Vea aquí: Derecho de petición de Wilson Toncel a Lewis Montero
https://issuu.com/revistazetta/docs/toncel_-_petici__n_a_montero