Grandes condominios se han apoderado ilegalmente de las playas de la zona de Pozos Colorados en Santa Marta, sin que autoridades como el Departamento Administrativo Distrital del Medio Ambiente (DADMA) adelanten acciones para impedir los perjuicios ocasionados, determinó una Actuación Especial adelantada por la Contraloría General de la República.
Los condominios Cabo Tortuga y Sierra Laguna están entre los que están incurriendo en esta irregularidad, afectando el sistema de humedales costeros del lago El Dulcino.
También se cuestiona a los constructores del edificio Sierra Beach Resort, que están produciendo graves afectaciones ambientales ambientales por descarga de sedimentos sólidos al lago.
La Contraloría estableció además vertimientos ilegales por parte de varios edificios, hoteles, apartahoteles, condominios y restaurantes, cuya lista se revela más adelante.
No hay acciones efectivas para evitar estos perjuicios
Para el organismo de control, las autoridades ambientales del Distrito de Santa Marta no han adelantado acciones efectivas para impedir los graves perjuicios ambientales causados por la ocupación y uso indebido de bienes de uso público, en las zonas de Playas y Bajamar.
Esta es la principal conclusión de una Actuación Especial adelantada con el objetivo de “evaluar la presunta ocupación de bienes de uso público en la zona denominada Pozos Colorados, ubicada en jurisdicción del Distrito Turístico e Histórico de Santa Marta – Departamento del Magdalena, con corte a junio de 2017”.
De la actuación realizada queda claro que las autoridades de territoriales y ambientales no han tomado las medidas protección a los derechos o intereses colectivos, para proteger y restituir los bienes de uso público y tampoco han garantizado el goce de un ambiente sano.
Puede haber responsabilidad penal
La Contraloría alertó también sobre la protección a áreas de especial importancia ecológica y el goce del espacio público y la defensa de los bienes de uso público que están siendo amenazados o violados por particulares.
Esta situación llevó a que el Contralor General de la República, Edgardo Maya Villazón, solicitara la intervención de la Fiscalía General de la Nación.
En oficio dirigido al Fiscal General de la Nación, Néstor Humberto Martínez, manifestó que “las gestiones adelantadas evidenciaron situaciones irregulares que pueden comprometer la responsabilidad penal de particulares y funcionarios públicos, toda vez que las mismas involucran la ejecución de proyectos urbanos sobre bienes de uso público o su apropiación, sin que se hayan tomado medidas necesarias para su recuperación, por parte de las autoridades llamadas a su protección”.
Expresó además que estas ocupaciones han generado enormes daños ambientales sobre el lago El Dulcino, cuya área total se ha reducido en los últimos años en más de nueve mil metros cuadrados (9.000 m2), por la construcción de edificaciones de vivienda o de explotación turística, licenciadas por las Curadurías Urbanas, desconociendo la especial protección que sobre el mismo se estableció mediante la Resolución 869 de 2013 expedida por el DADMA, como autoridad ambiental y la DIMAR.
“Las edificaciones, levantadas en la orilla del lago, vierten sustancias contaminantes sobre el cuerpo de agua, poniendo en riesgo los recursos fáunicos, forestales, florísticos e hidrológicos del mismo, sin que las autoridades del Distrito Turístico e Histórico de Santa Marta, hayan adoptado alguna medida para frenar los efectos nocivos que se están generando de manera permanente al ecosistema, conductas estas que se encuentran tipificadas como delictuales por el ordenamiento jurídico”, puntualizó Maya Villazón.
Ocupantes se han beneficiado de procesos de recuperación
La Contraloría General constató que pese a que se han llevado a cabo algunos procesos administrativos para la recuperación de los bienes de uso público ocupados por particulares, los procesos correspondientes contienen presuntas irregularidades y, pese a las advertencias que ha hecho la DIMAR, han terminado beneficiando a los ocupantes, a quienes no se les exige la adopción de medidas para la preservación del medio ambiente y realizan vertimientos contaminantes a las aguas marinas, causando daños a la fauna y flora nativas, incurriendo en conductas con presunta incidencia penal.
Para el contralor Maya Villazón la situación descrita, pone de manifiesto la presunta transgresión del ordenamiento penal, que merece la intervención de la Fiscalía General de la Nación, con el fin de que adelante las investigaciones que correspondan en el marco de su competencia, en procura de la protección de los recursos naturales y el medio ambiente, como patrimonio de todos los colombianos.
Fragmentación y destrucción del sistema de humedales del lago El Dulcino en la zona de Pozos Colorados
El sistema de humedales costeros de Lagos del Dulcino se encuentra localizado en el sector de Pozos Colorados (Fotografía N°1). La declaratoria oficial de protección de estos ecosistemas fue dada por el DADMA mediante Resolución N° 869 del 30 de diciembre de 2013. El sistema está compuesto por 3 espejos de agua principales de aguas salobres a hipersalinas comunicados entre sí.
- Edificio Cabo Tortuga
Se determinó que entre las medidas impuestas por el Juzgado Cuarto Administrativo de Santa Marta dentro de la acción popular 2013-205 presentada por la DIMAR, para la rehabilitación ecológica de la Laguna Costera adyacente al Condominio Cabo Tortuga se encontraba realizar intervención hídrica del cuerpo de agua con el fin aumentar la conexión de la laguna con el sistema lagunar adyacente.
Sin embargo, las obras realizadas aislaron del contacto con el agua varias plantas de manglar, lo cual está provocando la muerte de una porción de estos importantes ecosistemas.
- Edificio Sierra Laguna
Se verificó que a la altura del Condominio Sierra Laguna, el Lago El Dulcino se encuentra encerrado por una malla perimetral y muros en concreto que impiden el libre paso de personas, desconociendo su naturaleza de humedal y por lo tanto de bien de uso público.
Por otro lado, el canal El Dulcino que debería permitir el ingreso de agua de mar al sistema de lagos, se encuentra taponado por arena la mayor parte del año eludiendo así la responsabilidad asignada por el DADMA[1] a Sierra Laguna para realizar el mantenimiento de esta estructura.
El DADMA no se ha pronunciado sobre este hecho o sancionado a la firma por el incumplimiento en cuanto a su limpieza periódica.
- Edificio Sierra Beach
Durante la actual construcción del Edificio Sierra Beach, se ha afectado el humedal Lago El Dulcino por descarga de sedimentos sólidos que favorecen la colmatación acelerada, con sus respectivos daños ambientales para la dinámica ecosistémica.
Este edificio ha ocupado ilegalmente la zona de ronda del humedal ya que no se respetó la franja mínima de protección alrededor del Lago El Dulcino, lo cual no solo contraviene lo estipulado en el Artículo 83 del Código de Recursos Naturales, sino que tiene efectos negativos ambientales en la zona de ronda y en el cuerpo de agua.
Según la Contraloría, todas las irregularidades citadas se propician debido a la ausencia de un Plan de Manejo Ambiental para el sistema de humedales El Dulcino, el cual debió ser elaborado y aprobado por el DADMA dentro de los 24 meses siguientes a la declaratoria oficial de los humedales en el año 2013, de acuerdo con la normatividad ambiental vigente.
Contaminación del Lago El Dulcino por vertimientos ilegales
La CGR estableció que los vertimientos de los establecimientos Edificio Lagomar, Apartahotel Sura Mar, Hotel Los Veleros, Hotel Tequendama, Hotel Quinta Santa Marta, Hotel Santa Marta Real, Hotel Sharaima, Edificio Teyuna, Edificio Kalamary, Edificio Caribe Palma, Condominio Villas de Fontanar, Hotel Fontanar, Restaurante Mapy y Restaurante Punto Rojo, son enviados a poza séptica, pero no tienen el respectivo permiso de vertimientos emitido por el DADMA.
Esto quiere decir que la Alcaldía de Santa Marta, representada por el DADMA, carece de la información técnica necesaria para garantizarle a la sociedad samaria, la debida protección de las fuentes de agua.
Igualmente, se verificó la existencia de 12 vertimientos presuntamente ilegales descargando a los humedales El Dulcino, dos de ellos provenientes del edificio Cabo Tortuga, nueve provenientes del edificio Sierra Laguna y uno proveniente del edificio Sierra Beach. Al respecto, el DADMA afirmó que no tiene ningún conocimiento ni registro de lo señalado por la CGR.
Por último, a los permisos de vertimientos al mar del Hotel Puerto Soñado y del Aeropuerto de Santa Marta, no se le ha realizado seguimiento por parte de CORPAMAG desde el año 2015 y 2014 respectivamente.
Destrucción de Manglares
El sistema de humedales El Dulcino se encuentra rodeado de un diverso ecosistema de manglar, dado que allí se han registrado todas las especies de mangle presentes en Colombia: Mangle Negro (Avicennia germinans), Mangle Blanco (Laguncularia racemosa), Mangle Zaragoza (Conocarpus erectus), Mangle Rojo (Rhizophora mangle) y Mangle Piñuelo (Pelliciera rhizophorae).
Lo anterior convierte a esta zona en un lugar de gran biodiversidad que de acuerdo a la normatividad ambiental goza de especial atención y protección. Sin embargo, el DADMA mediante permisos de ocupación de cauce que no cumplen con las especificaciones ambientales pertinentes, ha permitido la remoción y perdida de estos manglares para favorecer la construcción de edificios como Cabo Tortuga, Sierra Laguna y Sierra Beach.
Adicionalmente el DADMA, no ha realizado el inventario florístico que le permita evaluar y sancionar aquellos que intervienen de manera ilegal el mangle de la zona, y no se ha pronunciado para evitar que se introduzcan especies exóticas como las cactáceas y cocoteros, las cuales pueden destruir las especies nativas del sector.