El Tour de Francia 2019 comenzó con Mike Teunissen (Jumbo-Visma) rompiendo todos los pronósticos. El joven neerlandés aprovechó la ausencia de su líder Dylan Groenewegen, eliminado por una caída a 1,5 kilómetros de meta, para lanzar el sprint en primera persona y adjudicarse la mayor victoria de su carrera deportiva con un excelente sprint cuesta arriba. Teunissen batió sobre la misma línea de meta al favorito Peter Sagan (Bora-Hansgrohe) para hacerse con el maillot amarillo. Se trata del primer ciclista de los Países Bajos que encabeza la general del Tour de Francia desde que Erik Breukink ganó el prólogo de la edición de 1989.
176 corredores tomaron la salida en la primera etapa del Tour de Francia 2019 en Bruselas a las 12:27. En el primer kilómetro de competición arrancó el campeón olímpico e ídolo local Greg Van Avermaet (CCC Team), que se fugó junto a Natnael Berhane (Cofidis), Mads Würtz Schmidt (Katusha – Alpecin) y Xandro Meurisse (Wanty-Groupe Gobert). Los cuatro escapados alcanzaron su máxima ventaja, 3’20”, en el kilómetro 20 de competición. Van Avermaet se aprestó a pasar el primero por Mur de Grammont (3ª, km 43,5), el mítico Kapelmuur. Pese a que Meurisse le superó en el posterior Bosberg (4ª, km 47,5), el liderato de la Montaña quedó atado para el campeón olímpico, que levantó el pie dejando a sus tres compañeros protagonizar la escapada del día.
Bora-Hansgrohe sorprendió en el pavé
La aventura del trío, sin embargo, quedó anulada bastante antes de lo habitual. El sprint intermedio de Les Bons Villiers (-69,5km) espoleó a Bora-Hansgrohe para tomar la cabeza del pelotón y acelerar para sorprender a los rivales de Peter Sagan en la lucha por el maillot verde de la Regularidad en el sector de pavé de Thiméon (-76,5km). Dicho y hecho: el pelotón se partió en tres y el eslovaco pasó primero por el sprint, sumando sus primeros 20 puntos en busca del séptimo entorchado verde. La víctima colateral fue la fuga, absorbida aproximadamente a 71 kilómetros de meta.
Rossetto anima, Fuglsang sufre
Pasado el sprint intermedio, el pelotón se relajó y se produjo un reagrupamiento general. Fue a 59 kilómetros de meta que Stéphane Rossetto (Cofidis), debutante en el Tour de Francia, decidió atacar para protagonizar una fuga en solitario. Su ventaja máxima, registrada a 45 del final, fue de 1’50”. No obstante, el pelotón le mantuvo siempre al alcance de la mano y acabó por neutralizarle a 9 kilómetros de la llegada de Bruselas. Hubo, no obstante, espacio para los sobresaltos. A 20 de meta, Jakob Fuglsang (Astana) sufrió una caída que le dejó con brechas apreciables en codo y ceja. No obstante, el danés logró regresar al seno del pelotón antes del sprint inaugural de esta edición 106 de la Grande Boucle. Fue a 1,5 kilómetros de meta que sucedió la caída más grave del día, con el citado Groenewegen como principal afectado.