Cartagena de Indias, 26 de octubre de 2021.- A través de un proyecto de acuerdo presentado en la sesión de este martes, el concejal César Pión busca que se implemente la cátedra de historia de Cartagena dentro del plan de estudios de los colegios públicos de la ciudad y sus corregimientos.
Según Pión, lo que se pretende es que los estudiantes conozcan desde su edad escolar todo lo ocurrido desde la fundación de la ciudad, pasando por etapas como la Colonia, la Independencia, los cambios a nivel administrativo, político y social, entre otros. La iniciativa pretende aportar en la construcción de identidad y sentido de pertenencia de los estudiantes hacia Cartagena.
“La idea es establecer la cátedra de historia de Cartagena en las instituciones educativas y hacer de la cultura ciudadana de Cartagena un centro de acopio humano; a Cartagena llegan hermanos de todo el país y esto ha hecho de que el comportamiento cultural sea heterogéneo y se permita un desarrollo en Cartagena, es por eso que se debe establecer su cátedra de historia, la gente tiene que saber cómo llegamos, cómo nos liberamos y cómo nos mantuvimos en este territorio.
Si usted va a Barranquilla allá todo el mundo tiene sus símbolos definidos, el Junior, el Joe, el carnaval, entre otras. En cambio, en Cartagena no existe una identidad, eso se ha ido perdiendo. Con esta cátedra lo que buscamos es que los estudiantes entiendan sobre lo que ha acontecido en Cartagena y que se desarrolle ese sentimiento de apego y de pertenencia por la ciudad”, expresó el concejal Pión González.
EXPOSICIÓN DE MOTIVOS
“Por medio de la cual se establece la Cátedra de la Historia de Cartagena de Indias y se dictan otras disposiciones”.
Honorables Concejales: Presento a la consideración del Honorable Concejo Distrital, el proyecto de la referencia, el cual tiene como fundamento las siguientes motivaciones:
En 1994 el gobierno del presidente César Gaviria, tomó la decisión de eliminar la cátedra de Historia del plan de estudios de los colegios y la fusionó con la de Ciencias Sociales. Desde entonces, los jóvenes colombianos no veían ni en primaria ni en bachillerato una materia dedicada exclusivamente a aprender los procesos históricos por los que han pasado el país y el mundo. En cambio, estudian una llamada Sociales que, durante los 11 años que dura el colegio, mezcla temas de geografía, democracia, Constitución Política e historia.
Recogiendo las inquietudes que esta situación generó en amplios sectores académicos, de pedagogos e historiadores y, luego de surtir los debates correspondientes en el Congreso de la Republica, se aprobó la ley 1874 de 2.017, que restableció la cátedra de la historia, con lo cual consideramos, se viene a subsanar este vacío en el proceso de formación de nuestra población estudiantil.
Con el objeto de fundamentar el proyecto que estamos presentando a la consideración del H. Concejo, hacemos como nuestra, unos de los apartes de la exposición de motivos de dicha ley:
“El pensamiento histórico consiste en ayudar a los estudiantes a desarrollar las formas de investigación crítica que les permitan comprender cómo nuestra sociedad ha llegado a tener las estructuras actuales [histórica, social, económica, cultural y política] y, sobre esta base, ayudar a los estudiantes a desarrollar formas de acción y reflexión que les permitan participar en la lucha contra la irracionalidad, la injusticia y las privaciones en la sociedad. Para conseguirlo, la escuela, socialmente crítica, debe ofrecer a los estudiantes proyectos que requieren el desarrollo cooperativo del conocimiento y del discurso, la organización democrática y tareas socialmente útiles. Implica a la comunidad entera en el trabajo de la escuela y rechaza las barreras burocráticas que separan la vida y el trabajo de la escuela, de la vida y el trabajo de la sociedad. El Pensamiento Histórico motiva a los estudiantes hacia la reflexión autocrítica sobre sus propios conocimientos, formas de organización y acción”.
Igualmente se sostiene que: “En suma, hoy puede afirmarse que la intención del legislador respecto de la enseñanza de la historia, como contenido obligatorio y fundamental de la educación básica primaria y secundaria, plasmada en la Ley 115 de 1994 “se desdibujó, entre otras razones, por la dificultad del profesorado para articular las ciencias sociales históricamente, y por el poco tiempo asignado al conocimiento histórico social respecto de las demás asignaturas” (Ibidem), pero también y de manera muy significativa, por la inadecuada interpretación que los Lineamientos Curriculares dieron a este mandato legal”.
En ese sentido, la responsabilidad social de los historiadores es “enseñar a pensar históricamente. A no aceptar sin crítica nada de lo que se pretende legitimar a partir del pasado, a no dejarse engañar por tópicos que apelan a los sentimientos para inducirnos a no utilizar la razón (…) La nueva clase de historia que necesitamos debe servir para crear conciencia crítica acerca del pasado con el fin que comprendamos mejor el presente, debe aportar elementos para combatir los mecanismos sociales que engendran desigualdad y pobreza, y debe denunciar los perjuicios que enfrentan a unos hombres contra otros, y, sobre todo, a quienes los utilizan para beneficiase de ello”
Y concluye diciendo: “la enseñanza de la historia crítica permite a los estudiantes-ciudadanos comprender el mundo social y político en el cual viven…la historia enseña que las realidades actuales resultan de decisiones anteriores y que las resoluciones actuales determinarán nuestro futuro colectivo, finalmente, permite que los alumnos aprendan que en el mundo social y político no todos los enunciados son válidos o aceptables, ayudando así a combatir el relativismo
Por tanto, la identidad nacional ha de entenderse como un marco de referencia social y político basado en la construcción de una memoria colectiva mediante la cual enfrentamos el mundo. No podemos identificarnos con algo que no conocemos y por ello debemos empezar a enseñar dónde estamos y quiénes somos para construir un sentido de pertenencia e identidad”.
Al restablecer la Cátedra de Historia la mencionada ley fijó claramente dentro de sus objetivos, los siguientes:
“a) Contribuir a la formación de una identidad nacional que reconozca la diversidad étnica cultural de la Nación colombiana.
b) Desarrollar el pensamiento crítico a través de la comprensión de los procesos históricos y sociales de nuestro país, en el contexto americano y mundial.
c) Promover la formación de una memoria histórica que contribuya a la reconciliación y la paz en nuestro país”.
Es por esto Honorables Concejales, que es importante en la búsqueda de dichos objetivos, partir de la base de nuestra organización social, como son los municipios y en nuestra condición de Distrito, que, como lo señala nuestra Carta Política, son la base político-administrativa del Estado y, es desde esa visión territorial de donde surge la construcción de nuestra identidad nacional y por ende el conocimiento e investigación de su historia es fundamental en el proceso de formación de nuestros estudiantes.
En ese orden de ideas debemos señalar que, el conocimiento de la historia de Cartagena de Indias, no solamente es fundamental en la historia misma de la Nación, sino que, además, debe ser un motivo de orgullo cartagenero y generar un compromiso y un sentido de pertenencia, haciendo énfasis en principios como el civismo, la tolerancia, el emprendimiento y la solidaridad, que engrandezcan y aporten al desarrollo económico y social de nuestra comunidad.
Ese proceso de formación del recurso humano local, permitirá desarrollar un pensamiento crítico, desde una perspectiva del conocimiento y comprensión de su propia historia, que edifiquen una comunidad comprometida con su desarrollo, dentro de un marco de convivencia y paz. De ahí la importancia de generar un ciudadano ilustrado, comprometido y participativo en los procesos democráticos, en el que las diferencias, se pueden resolver en un marco de tolerancia de convivencia y paz.
Todo este proceso, debe conllevar a la construcción de la memoria histórica local, en la que no solamente las instituciones educativas del Distrito están llamadas a su formación, sino además, el papel que vienen desempeñando la Academias de la Historia de Cartagena de Indias y el Museo Histórico de la ciudad, a los cuales debe incentivarse su actividad y sostenimientos por parte del Distrito, así como su reconocimiento como instancias de carácter consultivos en los temas de su resorte histórico.
Finalmente, consideramos como complemento de la Cátedra de la Historia de Cartagena de Indias, se promueva en las instituciones educativas del Distrito la celebración de jornadas como conferencias, concursos y demás eventos que propendan el conocimiento del devenir histórico de la ciudad, todo ello dentro del contexto de la Historia Nacional.
Por todo lo anteriormente expuesto, solicito y agradezco a los Honorables concejales, impartir su aprobación al presente proyecto de acuerdo, con la aspiración que, con ello, estamos aportando a la formación de un mejor ciudadano, al promover el conocimiento y la investigación de la historia de Cartagena de Indias que, contribuya desde la base, a la construcción de nuestra identidad nacional dentro de un marco de convivencia y paz.
Honorables concejales,
CESAR PION GONZALEZ
Concejal del Partido de la U
Cartagena de Indias D.T. y C., 29 de julio de 2021
