Cartagena de Indias, 7 de julio de 2022.- Lo de menos es atender los problemas de la ciudad, lo que realmente importa es aceitar la maquinaria para prolongar el desgobierno.
El alcalde William Dau está recibiendo en su escritorio las cartas de renuncia de su gabinete, y el criterio es oxigenar su cuerpo de colaboradores con propósitos politiqueros, pero no para introducir ajustes en casi todas las áreas de la administración, que luego de dos años y medio han resultado infértiles.
La meta es armar una candidatura fuerte a la Alcaldía y una lista robusta para el Concejo, y sin aspavientos se emplearán las ventajas de tener presupuesto y contratación, como toda nueva empresa electoral neomalandrina.
No importa el nivel de mediocridad del funcionario, da igual si es uno que llega o si es ratificado, la única prioridad es obedecer la apetencia electorera del neomalandrín a cargo.
Aunque hay audios y videos que constatan su constante participación en política, los organismos de control nada hacen, lo que le da la confianza a Dau para seguir con sus neomalandrines planes.
La victoria de Gustavo Petro en la Presidencia acrecentó las ínfulas monárquicas de Dau, quien cree que la sombra electoral del electo presidente le cubrirá como único personero del Pacto Histórico en Cartagena.
