Por John Zamora (Director de Revista Zetta).- #EXCUSIVO. Las autoridades identificaron a un tal “Billy The Sniff” como el cabecilla de una banda que ha terminado de destruir a toda una urbe, en un rincón del Caribe colombiano, y robarle todas sus esperanzas.
El paradero de Billy The Sniff en este momento es incierto. Se dice que escapó a un paraíso fiscal a depositar sus ganancias de operaciones directas con firmas monopólicas, otras versiones dicen que se camufla en eventos internacionales a tomar escocés y hacerse pasar por adalid justiciero, pero lo más probable es que se haya ido solo unos días para terminar de fraguar su terrible plan de perpetuarse en dicha comarca.
Tiene una escudera que responde a varios alias. A veces al nombre clave de la “Pelo Azul”, o la “Pitufina”, pero recientemente se le identifica como la “buena-para-nada”.
Este último alías se cree que es un distractor, porque hay varias integrantes de esta banda que también son identificadas como “buenas-para-nada”, como una que se la pasa haciendo turismo “Naty, la vaga”; otra que le dicen la “Olga, la maleducada”, y otra la “Diana, la cachaca hacendosa”.
Luego de tres años de haber asaltado a la urbe con pistola moral en mano diciendo “manos arriba, calzones abajo”, la idea ahora del clan “Macabre” es termina de ejecutar un siniestro plan llamado “patas arriba”.
“Es la estructura mas tenebrosa a la que nos hemos enfrentado”, dice un analista de seguridad que pidió el anonimato, y quien trazó esta hipótesis:
Volver «Patas arriba» a la ciudad era el verdadero propósito, y lo han logrado. Ahora, la segunda fase es decir que son unas oscuras fuerzas las responsables verdaderas, echarles toda la culpa, y ponerlas a pelear. Saben que de la calumnia algo queda.
El experto asegura que los “Macabre” son la cabeza de una nueva forma de asalto popular llamada “neomalandrina”, cuya estrategia es despotricar, insultar, pasayasear, güevonear, vagar, beber, fumar, volver a payasear, pleitear… y ahora están entrando en una fase igual de peligrosa para calumniar, inventar, acusar, señalar, manipular y descalificar.
“Saben que tienen los días contados, que el sol ya se oculta, y quieren tapar todo el desastre que hicieron. Que si los semáforos no funcionan, que si hay basura en las calles, todo será parte de un complot, de una conspiración, de un concierto”, indicó otro de los expertos.
Consultado el experto para poder descubrir las mentiras de los Macabre, el especialista reveló esta técnica:
-“Para saber si un Macabre está mintiendo, ponga mucha atención; fíjese en sus labios, si los mueve, ¡miente!”
La urbe azotada ya no le come cuento a los Macabre, sabe que son neomalandrines que se instalaron en el poder para cantar “quítate tú, pa´ponerme yo”, y que han tomado miles de millones de presupuesto para no hacer nada y llenarse los bolsillos con la depuración de técnicas ya conocidas, como ejércitos de OPS que cobran pero no trabajan, mordiscos en contratos amañados y mucha, pero mucha, demagogia o habladera de …
Conversaciones interceptadas con bodegueros contratados señalan que los “Macabre” tienen una alianza con el poderoso capo de la “Montaña”, con sede en una ciudad arriera, desde donde están fluyendo recursos para alimentar un nuevo malandro que suceda en el poder a “Billy the Sniff”.
“Hay que esperar que les pase la lloradera” fue la última orden interceptada a Billy The Sniff, quien se prepara para volver a su guarida y desplegar la última parte de su macabro plan.
¿Logrará Billy The Sniff ejecutar su macabro plan?
¿Las “buenas-para-nada” seguirán difamando para tapar su basura?
¿Permitirá urbe azotada que Billy The Sniff se salga con la suya?
Vea el desenlace de estas y muchas otras preguntas en próximos capítulos.
