«No soy el jefe de una banda, el único pecado que tiene mi familia es querer trabajar»

El concejal de la bancada ASI , Américo Mendoza, finalmente hace referencia al tema de la captura y reciente puesta en libertad de su esposa e hijos, quienes habían sido señalados como presuntos responsables del detrimento de recursos del ICBF en un contrato suscrito con la fundación Prociencia para la alimentación de niños de 0 a 5 años en Bolívar. “El único pecado que tiene mi familia es querer trabajar es querer sacar una fundación adelante donde han venido generando empleo para mucha gente” afirmó.

Tras determinar que Los argumentos y pruebas de la Fiscalía no eran suficientes para determinar su culpabilidad, La juez 17 Penal Municipal con funciones de control de garantías de Cartagena, Yesenia Bonfante, ordenó este jueves la libertad inmediata de su esposa, Flor Pérez Gutiérrez, y sus hijos Iván Camilo y María Camila Mendoza Pérez. También recobraron la libertad Olga Pérez Gutiérrez, cuñada del concejal y representante legal de Prociencia; y Patricia Arnedo Pombo, quien ocupó el mismo cargo en 2015.

Estas fueron sus declaraciones:

“Mis hijos y mi señora fueron declarados prácticamente unos delincuentes por la Fiscalía. Gracias a Dios la justicia terminó dándonos la razón y desvirtuando todos los cargos que en su momento procuró la Fiscalía, lo cual demuestra que no soy ni el jefe de una banda como pretendió insinuar la señora fiscal y tampoco mi familia.

El único pecado que tiene mi familia es querer trabajar, sacar una fundación adelante donde han venido generando empleo para mucha gente, una fundación que en el ranking de las empresas que generan confianza y empleo en la ciudad siempre ha estado entre las mejores desde el 2007 hasta la fecha.

Sin embargo los hijos míos, Iván Danilo, una persona que a los 16 años me pidió un voto de confianza para irse a la Universidad del Norte a estudiar, y al año logró que la universidad lo admitiera en una segunda carrera y cursar 2 carreras con promedio superior a 4.20. Mi hija tomó la decisión también a los 16 años de irse a Barranquilla a estudiar y siempre estuvo entre los 2 o 3 primeros estudiantes de la Universidad Autónoma donde curso su carrera.

Iván, durante el tiempo que ha venido estudiando además de ser un excelente estudiante tuvo un intercambio con la Universidad Del Rosario y posteriormente fue con la universidad Borgona de Francia y estos elementos en vez de ser utilizados como acto ejemplar lo utilizaron para insinuar que era una persona que frente a una suposición que tenía la fiscalía, en cualquier momento se podía ir del país porque tenía varias salidas internacionales.

No entiendo cómo opera la justicia aquí pero de lo que si estoy seguro es que se ha cometido una gran injusticia y la verdad tiene que salir a flote. Estoy muy dolido con la situación. Han atropellado mi familia, se han metido con el mejor patrimonio que nosotros tenemos porque en mi recorrido el único ejemplo que les he dado a mis hijos es trabajar, estudiar, tratar de ser un ejemplo para las nuevas generaciones; a mí en la universidad, muchos estudiantes me tienen como el reflejo de lo que le gustaría ser. El patrimonio que nosotros tenemos, que es un patrimonio moral, centrado en la vocación de servicio, en el acompañamiento con la gente, prácticamente fue pisoteado.

Una señora nos mostró como trofeo ante el fiscal para que el Fiscal general de la nación viniera y se diera un vitrinazo aquí, lo asaltó en su buena fe, este es el resultado de esos días que nos ha tocado sufrir a mi familia y a mí.