Alcalde encargado Sergio Londoño Zurek y miembros de gabinete se reunieron para ultimar detalles y alistar a la ciudad para la temporada vacacional más larga del año.
Control estricto al ingreso de Playa Blanca, a los precios en los establecimientos de comercio, a los caballos cocheros e incremento en la frecuencia de recolección de residuos en el Centro Histórico y en las playas, son algunas de las medidas que adoptó el gobierno Distrital para la temporada turística de mitad de año.
La ciudad espera para las vacaciones de junio unos 400 mil visitantes, un incremento del 10 por ciento con relación a la misma época del año anterior, y una ocupación hotelera del 70 por ciento, según cifras de Corpoturismo.
Por eso de manera articulada, las diferentes dependencias del Distrito trabajarán para que la ciudad esté preparada para dar una estadía agradable a nuestros visitantes.
“Tenemos una serie de controles e incentivos al turismo formal y a quienes se porten bien con Cartagena. La ciudad está lista y los recibe con los brazos abiertos, es una temporada larga, porque son más de 30 días, pero eso genera comercio, empleo y recursos para la ciudad”, precisó el alcalde encargado, Sergio Londoño Zurek.
Zully Salazar, directora ejecutiva de Corpoturismo, manifiesta que “es un reto para la ciudad, y nos estamos preparando para que los turistas tengan una grata experiencia en Cartagena. Con Asotelca, Cotelco, Anato y Fenalco nos estamos reuniendo para preparar productos turísticos y toda la oferta de hoteles nuevos y restaurantes a los turistas que nos visitan”.
Desde el Dadis se harán controles de inspección de alimentos y bebidas, y se mantienen los cuatro puestos de atención prehospitalaria para atender cualquier
emergencia en las playas desde Bocagrande, Castillogrande, La Boquilla y el balneario de Playa Blanca. Se tiene dispuesto una ambulancia y una moto dotada de equipos paramédicos.
Para mejorar la movilidad se continuarán los controles al mal parqueo, al tránsito de vehículos en la playa, Centro Histórico y en los terminales aéreo y de transporte. Unos 16 agentes de tránsito, 150 reguladores y 25 educadores viales apoyarán las labores de control vehicular.
Se harán operativos especiales en la entrada a Playa Blanca para controlar su ingreso hasta llegar a las 3.500 visitantes y no afectar la capacidad de carga de este balneario. El Datt, Secretaría del Interior, Parques Nacionales y Policía tendrán retenes, y a la hora que se contabilice esa cifra se cierra el paso vía marítimo y terrestre.
“Se controlará que no ingresen alimentos y bebidas y vigilará que su uso es de 6 de la mañana hasta las 6 de la tarde, para evitar los daños ambientales a esta franja de playa y se instalarán 16 baños portátiles”, manifiesta el Secretario del Interior, Fernando Niño.
La Armada Nacional con Guardacostas y la Dimar realizarán operativos marítimos a las embarcaciones turísticas y motonaves verificando que tengan la documentación requerida. Tendrán unidades de reacción en Islas del Rosario, Cholón, Bahía y por el fuerte de San José y una patrullera de costa que estará en Cholón.
Los caballos cocheros serán sometidos a controles por parte de la Umata y el Datt, y las pesebreras serán revisadas por el Dadis.