Los Medias Rojas eliminaron a los Yankees en el Juego 4 de la SDLA la noche del martes, 4-3, y ahora enfrentarán a los Astros en la SCLA. En una novena entrada no apta para cardiacos, el cerrador de Boston, Craig Kimbrel, se las arregló para sellar la anhelada victoria.
Tras caer el último out, llegó la hora de relajarse y celebrar en el clubhouse para los Medias Rojas. Por supuesto, ésta no fue una victoria de postemporada común y corriente. Como ya todos sabemos, la rivalidad Medias Rojas-Yankees es una de las más grandes de todos los deportes profesionales, y hay mucho en juego cada vez que estas dos escuadras se ven las caras.
Una victoria de tal magnitud requiere de una celebración a otro nivel…es por ello que los jugadores de los Medias Rojas entonaron la famosa melodía de Frank Sinatra y canción con la que los Yankees celebran cada victoria en casa, «New York, New York», en el clubhouse como parte de su celebración.
«La meta es mucho más grande que una serie divisional», recalcó Alex Cora, el boricua que ha protagonizado un estupendo año de debut como piloto. «Lo que hicimos fue gratificante al venir acá y ganar estos partidos ante esta clase de equipos como lo son los Yanquis».
El jonrón solitario de Christian Vázquez marcó la diferencia en la victoria de los Medias Rojas, sentenciada tras un noveno inning de infarto cuando su estelar cerrador Craig Kimbrel estuvo a punto de malograr una ventaja de tres anotaciones.
Todo terminó con una revisión del video para el out número 27, en un rodado que Gleyber Torres bateó por la tercera base. El disparo del antesalista Eduardo Núñez al primera base Steve Pearce superó por un paso la carrera del novato venezolano.
Los jugadores de Boston debieron esperar un minuto y tres segundos para que se confirmara el out y desatar el festejo.
Antes habían sufrido un susto tremendo. Con las bases llenas, un batazo de Gary Sánchez fue atrapado cerca del muro por el jardinero izquierdo Andrew Benintendi. Solo quedó en un elevado de sacrificio y no en el grand slam que hubiera forzado un quinto y definitivo duelo en la serie divisional.
«Le pegué bien, sólo que un poco abajo», explicó Sánchez.
Una noche después de propinar una paliza por 16-1 a los Yanquis en su propia casa, Boston apuró el paso ante CC Sabathia para llevarse la primera serie de postemporada que disputó contra sus odiados adversarios desde 2004.
Rick Porcello cubrió cinco innings, en los que aisló una carrera y cuatro hits, mientras que el as Chris Sale salió del bullpen para sacar en 1-2-3 el octavo. Kimbrel sorteó el noveno con un sufrimiento extremo, permitiendo dos carreras.
Lo siguiente para el conjunto que lideró las mayores con 108 victorias — un récord de la franquicia — será enfrentar a los Astros de Houston a partir del sábado en el Fenway Park de Boston. Houston eliminó a los Medias Rojas en la ronda divisional el año pasado rumbo a la conquista de su primer campeonato de la Serie Mundial.
«Nos sentimos contentos, pero no complacidos. Todavía nos falta mucho», advirtió Cora. «Vamos a enfrentar a los campeones mundiales».