El río Magdalena… y la suerte de los bolivarenses – Opinión Miguel Raad H.

El sábado 13 de septiembre el Presidente Santos firmó el contrato para la recuperación de la navegabilidad del Río Magdalena. Este contrato tiene un valor de 2.5 billones de pesos y el compromiso de intervenir 908 kms de la extensión total del Río. Lo hizo en Barranquilla, acompañado del Vice- Presidente Vargas Lleras, del Gobernador del Atlántico, de la Alcaldesa de Barranquilla, del Gerente barranquillero de Cormagdalena Augusto García, del Presidente barranquillero del Congreso José David Name y del resto de la dirigencia política, empresarial, logística y portuaria del vecino departamento. El contrato se firmó, además, con un consorcio integrado por la firma brasileña ODEBRECHT y la barranquillera Valorcon.

Cuando destaco la presencia e influencia de los barranquilleros y atlanticenses en tan importante ceremonia, no lo hago por molestarlos o por criticarlos, por el contrario, lo hago con respetuosa admiración, porque ello denota una clase dirigente con visión y claridad de propósitos, que piensa en grande y se unen para controlar o influenciar la orientación de las inversiones hacia el desarrollo de su tierra y de su pueblo.

Lamento, eso sí, que no hubiera presencia de las autoridades del Departamento de Bolívar y Cartagena. Tampoco se sabe que hubiera presencia de empresarios de nuestra localidad. Se puede decir, como decían los romanos que  ambos, autoridades y empresarios, «brillaron por su ausencia».

Esa ausencia es inexcusable. El Río Magdalena recorre toda la extensión del Departamento de Bolívar desde CANTAGALLO, en el extremo sur, hasta Calamar. Y desde este Municipio hasta Cartagena, por el Canal del Dique. Fue el Gobernador Pedro Zapata de Mendoza quien, comprometiendo todo su salario y avalando personalmente un crédito para tal fin, se propuso establecer el canal como una vía segura de comunicación de Cartagena hacia el interior del territorio y viceversa. El Canal del Dique contribuyó a fortalecer la posición de Cartagena durante la colonia, como principal Puerto estratégico de las Américas. He ahí lo que es verdadera visión de futuro y de grandeza.

Lo triste es que el contrato adjudicado NO intervendrá el Canal del Dique. Ello a pesar que requiere URGENTEMENTE dragado del cauce, modificación de su rectilíneo trazado actual, trampas de sedimentación, comunicación sistémica y controlada con las Ciénagas aledañas e, importantísimo, control de los sedimentos que vierte a la Bahía de Cartagena. Hasta ahora lo único que se ha hecho por el Gobierno Nacional es adjudicar algunas obras de defensa de orillas, para evitar inundaciones, por 10 mil millones de pesos, suma irrisoria al lado de la magnitud del valor del contrato firmado el sábado.

Tengo muchas inquietudes y preguntas. ¿Por qué no se incorporó el Canal del Dique al contrato firmado con ODEBRECHT – VALORCON? ¿Por qué el Gobierno no acelera la contratación de las obras de dragado, rectificación de trazado y control de vertimientos a la Bahía de Cartagena? ¿Qué estrategia y/o gestiones han realizado nuestros Gobernador de Bolívar y Alcalde de Cartagena para defender nuestro futuro como centro logístico y portuario? ¿Esperaremos que se sedimente la Bahía y Barranquilla nos remplace como el principal puerto colombiano?

Por Dios, que alguien nos responda. Es urgente, estratégico y vital.

COLETILLA: El debate del miércoles en el Congreso entre los senadores Iván Cepeda y Álvaro Uribe fue más el contrapunto de odios y pasiones que  el afán por los superiores intereses de la Nación. Mal ejemplo para nuestra juventud