Ley que encara violencia política contra la mujer pasó a tercer debate

Violencia política, el flagelo silencioso. Según la última encuentra sobre violencia política de género realizada por la Misión de Observación Electoral, el 83% de las mujeres candidatas a las elecciones legislativas del 2022 afirmó que había sido víctima de estas agresiones. En Colombia, la violencia política aún está tan normalizada que es percibida por las mujeres como un costo que deben pagar por desempeñar cargos de elección popular

Bogotá, 28 de noviembre de 2022.- A tercer debate pasó el proyecto de ley que busca prevenir, sancionar y eliminar todo tipo de violencia contra la mujer en la política y garantizarle el pleno desempeño de sus derechos políticos al brindarle una participación en condiciones de respeto y equidad.

La iniciativa, de autoría de las senadoras Nadia Blel, María José Pizarro y Piedad Córdoba, busca diseñar las políticas necesarias para promover el derecho de las mujeres a una vida política libre de violencia, crear una hoja de ruta para atender y resolver las denuncias de estos actos, garantizar la restitución de los derechos perdidos y sancionar la práctica de estas conductas.

“La violencia NO hace parte de la política. Sin una política plena y equitativa no puede haber una verdadera democracia, por eso debemos contar con una herramienta que permita que mujeres y hombres podamos hacerles frente a estos actos. No basta con que más mujeres accedan a cargos legislativos, necesitamos que quienes lo hagan puedan ejercerlo sin violencia”, indicó la senadora Nadia Blel

La aprobación de este proyecto en segundo debate es de suma importancia debido a que tuvieron que pasar casi 10 años y 4 intentos de la senadora Blel y la bancada del Partido Conservador para que se consolidara y aprobara por unanimidad una iniciativa que haga visible en Colombia este flagelo, muchas veces normalizado.

Según la última encuesta sobre violencia política contra la mujer realizada por la Misión de Observación Electoral, en Colombia el 83% de las mujeres candidatas a las elecciones legislativas de este 2022 afirmó que había sufrido al menos alguna de las formas de violencia física, psicológica, económica, sexual o simbólica. La manifestación de violencia más común fueron los comentarios agresivos o el acoso digital.

Igualmente, el estudio encontró que este tipo de conductas son ejercidas en un 60% por militantes y líderes de partidos rivales lo que revela que la hostilidad contra las mujeres viene en gran parte desde el mismo escenario político.