Por Ambrosio Fernández (Especial para Revista Zetta).- Cartagena de Indias, 3 de noviembre de 2023.- La ciudadanía se pronunció y eligió a Dumek Turbay como nuevo mandatario de Cartagena. Con un triunfo contundente en las urnas, los analistas concuerdan que los resultados de las elecciones del pasado domingo son un mensaje de desaprobación a William Dau, actual alcalde y quien fue elegido hace cuatro años, como una esperanza de cambio y progreso para la ciudad, cosa que no solo no logró, sino que, en distintos aspectos, parece haber complicado aun más el panorama para los cartageneros.
De acuerdo como lo dispone la ley, tanto el actual alcalde, como el electo, deben surtir un proceso de empalme, que asegure una transición tranquila entre ambas administraciones, presentando los menores tropiezos en el ejercicio de la gestión pública. El empalme no es una invención de los mandatarios ganadores, el Departamento Nacional de Planeación incluso dispuso desde hace unos meses de un documento, denominado “Guía con Orientaciones para la Transición de Gobiernos Territoriales” en el cual se orienta, por medio de actividades sugeridas a las administraciones, la elaboración de los informes de gestión y balance de resultados, rendición de cuentas y el proceso de empalme con las nuevas administraciones. Es decir, no se trata de un asunto de carácter mediático o de saludos protocolarios.
A pesar de que en casi todas las regiones el proceso de empalme ha iniciado de manera satisfactoria, en Cartagena, hasta este momento ha tenido algunos tropiezos. En declaraciones a la prensa, el burgomaestre cartagenero afirmó que hasta que Dumek Turbay no tenga la credencial oficial, que lo acredita como alcalde, el proceso no comenzará.
Un hecho lamentable, que puede interpretarse como que en Dau pesa más la aversión personal que tiene con Dumek, que los intereses de la ciudad. La gestión pública es compleja y entre más detalles se puedan conocer de los proyectos, iniciativas o procesos que adelanta la Alcaldía Distrital o los diferentes institutos que la conforman, más rápido la administración entrante tomará ritmo en su trabajo. El empalme no debería pasar por un asunto de egos u orgullos, pues en el medio están los ciudadanos, que requieren que sus necesidades sean atendidas y que esperan que sus gobernantes dejen atrás sus rencillas, para que de manera ágil y positiva se impacte en su calidad de vida.
El domingo 29 de octubre los cartageneros votaron por caminar hacia el futuro y le dieron un portazo a los discursos de odio y la poca gestión administrativa. Esta también es una invitación para Dau, como líder de un grupo político, para que, en sus últimos días en la alcaldía, pueda cumplir con la tarea más necesaria que se le encomendó hace 4 años, la de poner a Cartagena por encima de cualquier interés personal.
Ambrosio Fernández*
Miembro de la Comisión de Empalme designada por Dumek Turbay.