En la frontera entre Colombia y Venezuela se ha venido gestando una crisis humanitaria a partir de la decisión de expulsar a los colombianos, que según las autoridades venezolanas se encontraban alla de forma ilegal. A raíz de esto, muchas voces han surgido para defender a los damnificados nacionales y desde el Congreso de la República han intervenido en favor de los niños afectados.
El Senador del Partido de la U, Andrés García Zuccardi, quien ha venido trabajando en contra de la violencia infantil desde los planos escolar y familiar, se pronunció frente al tema: “Es triste que una frontera de 2.219 kilómetros y una historia compartida de siglos se vean empañados por una disputa con tinte político y electoral, pero partiendo de esta realidad, debemos mantener al margen de toda acción violenta y todo peligro a nuestros niños, quienes merecen toda nuestra atención y cuidado, por eso, exigimos desde el Congreso la presencia de las autoridades respectivas encargadas de garantizar el bienestar de los infantes”.
Asimismo, el Senador García fue crítico frente al drama de las familias que como consecuencia de las deportaciones se han tenido que fragmentar, aclarando que no se debe imponer la fuerza para desintegrar a la familia y que los niños, cerca de 1200 migrantes, que han sido desplazados a la fecha, no sólo deben ser atendidos ahora sino que se les debe hacer un acompañamiento que les permita reintegrarse a la sociedad colombiana.